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La Comisión Europea ha creado el proyecto LABEL, en el que participan clubes europeos de automovilistas (el español RACE, entre ellos), con lo que se quiere catalogar un sistema de certificación para zonas de aparcamiento de vehículos pesados. El estudio, que ha sido incluido en el programa EuroTest, ha analizado un total de 50 de estas zonas en Europa, evaluando los sistemas de seguridad y los servicios disponibles.
Cada año se roba en Europa carga de los camiones por un valor superior a 8.000 millones de euros.
Para ello, han creado una simbología que ayude al usuario a saber si se encuentra en una zona de aparcamiento segura o no. El proyecto ha concebido candados para definir el grado de seguridad y estrellas para catalogar los servicios. Los niveles varían entre 1 y 5, señalando que el valor 1 significa “muy poco seguro” y “servicio deficiente” y el 5 quiere decir “muy seguro” y “servicio excelente”. De este modo, los conductores pueden saber de un vistazo si se encuentra ante una zona de aparcamiento en la que puede confiar.
Participación
Para llevar a cabo este estudio, se analizaron 50 zonas de aparcamiento de 11 países europeos: dos en Bélgica, Bulgaria, Países Bajos, Austria, República Checa y Hungría, seis en Reino Unido e Italia (respectivamente), ocho en España y Francia y 10 en Alemania. Las zonas de aparcamiento se seleccionaron de acuerdo con su localización y sus características.
Los clubes asociados que participan en el EuroTest sugirieron la mitad, mientras que la otra mitad se seleccionó entre un grupo de 70 zonas de aparcamiento que han solicitado la certificación de los institutos de ensayo Dekra y Atlantis, asociados al proyecto LABEL. De esta manera, los responsables del proyecto podían comparar entre la amplia gama de aparcamientos estándar y las instalaciones gestionadas por operadores conscientes de la seguridad y que aspiran a conseguir la certificación.
El grupo alemán, coordinador del estudio, encargó a una empresa las pruebas de campo. Los encargados del proyecto recorrieron entre el 8 el 23 de diciembre de 2009 las zonas de aparcamiento para vehículos pesados, un total de 30.000 kilómetros. Dos inspectores examinaron cada instalación en dos días diferentes: una de día y otra, de noche.
La lista incluyó un total de 150 elementos. Después de cada inspección (hechas siempre de incógnito), los expertos revelaron su identidad para discutir con la dirección cualquier cuestión que no se hubiese podido aclarar durante la prueba visual. Además, llevaron fotógrafos consigo para documentar cada inspección.
A la búsqueda de zonas de aparcamiento seguras y confortables, los inspectores encontraron instalaciones inseguras e incómodas. Es más, en una cuarta parte de las 50 instalaciones, no fue posible puntuar la categoría de Seguridad porque se incumplían los niveles mínimos. Además, más de una tercera parte de ellas consiguió un solo punto. Por otro lado, nueve instalaciones cumplieron los niveles máximos de seguridad.
En cuanto a servicios, dos instalaciones consiguieron una calificación de cinco puntos, seis merecieron cuatro puntos y casi la mitad recibió tres puntos.
Un servicio importante es ofrecer información fiable sobre seguridad y protección para los conductores y sus vehículos pesados.
Por países
El recorrido se inició en el Reino Unido, con resultados que no podían haber sido más diversos. Mientras que Ashford International Truckstop aparece como una de las dos mejores zonas de aparcamiento para vehículos pesados, Tayside Truckstop ocupó el último puesto. Ya en Italia, Autoparco Brescia Est consiguió la última posición entre las mejores. Sin embargo, Autoporto Ventimiglia y Susa Rivoli Sud no alcanzaron los niveles mínimos de seguridad, y el área Comense suspendió en la categoría de Servicios. Por tanto, ninguna de ellas alcanzó el nivel más bajo de certificación
En España, la impresión de los inspectores fue bastante grata: en el apartado de Seguridad, tres áreas consiguieron calificaciones de cinco puntos: El Navarro, Padrosa y Cim Vallés, mientras que Arasur consiguió cuatro puntos. Las restantes zonas sometidas a examen consiguieron un punto en Seguridad, excepto Castillo el Burgo, que obtuvo dos puntos. Torres Mancha recibió dos puntos en la categoría de servicios, y todas las demás presentaron niveles más altos.
De las tres áreas francesas, el resultado conseguido fue bastante satisfactorio: tanto All4Trucks, con un eficaz registro de entradas y salidas, Truck Etape Valenciennes y SecuriTpark. Los resultados fueron más uniformes en la categoría de Servicios, donde todas estas zonas puntuaron alto.
En el 25% de las zonas analizadas, no se pudieron puntuar porque no llegaron al mínimo de seguridad exigido.
En cuanto a Bélgica, Truckstop 26bis y Jabbeke Noord obtuvieron tres puntos en servicios; sin embargo, en la categoría de Servicios, la cosa cambió: mientras que Jabbeke Nord no consiguió ningún punto, Truckstop 26bis obtuvo dos. Los Países Bajos no salieron mejor parados: dos puntos en Seguridad para Frans Op den Bult y un punto para Truck Inn Nobis. Sin embargo, ambas zonas consiguieron tres puntos en Servicios.
Centro y Este
Con sus puntuaciones bajas en Seguridad, Alemania demostró ser típicamente europea. Mientras que Uhrsleben y Wörnitz obtuvieron cuatro puntos en seguridad (por sus procedimientos de entrada eficaces), Hochwald Ost, Granschatzer Wald, Weil am Rhein Ost y Cühleck Süd no consiguieron la certificación debido al incumplimiento de los niveles de seguridad. Kreling Tank-Service arrebató apenas un punto por los Servicios, a pesar de ser la única de las diez instalaciones sometidas a estudio que contaba con un servicio de lavado de camiones.
Todas las demás zonas de aparcamiento tenían un nivel superior, e incluso la zona de aparcamiento de Wörnitz disponía de una sauna. Esto colocó a Alemania a la cabeza de la competencia europea en la categoría general de Servicios.
Su vecino Austria puntuó mucho más alto en la categoría de Servicios (tres puntos para Suben West y dos puntos para Engerwitzdorf) que en Seguridad. La segunda apenas consiguió arrancar un punto por Seguridad, pero West, una zona de descanso tanto para conductores de turismos como de camiones, no alcanzó siguiera un mínimo en niveles de Seguridad. Por lo tanto, no obtuvo ningún punto.
Según los datos obtenidos, Bulgaria confía más en los recursos humanos que en el equipamiento de alta tecnología. Así, Vidin South recibió un punto por Seguridad y tres puntos por Servicios, mientras que Nira Complex obtuvo tres puntos por Seguridad y dos por servicios. Por su parte, el rendimiento de las dos candidatas checas en la prueba no fue de lo mejor. Eurowag Rozvadov y CDS Nachod-Beloves recibieron sólo un punto por Seguridad.
Además, los inspectores consideraron que tampoco eran convincentes en la categoría de Servicios. Dos puntos fueron para Eurowag Rozvadov y ninguno para CDS Nachod-Beloves, porque las instalaciones sanitarias, incluidos los aseos, estaban cerradas durante la noche y ni siquiera había un restaurante o una tienda. En realidad, esta última zona de descanso es una oficina aduanera.
En Hungría, los inspectores concedieron un punto a Stop Vengéglö por Seguridad y otros dos puntos por Servicios. Bor-Ba-Sped no puntuó en la categoría de Seguridad y recibió un solo punto por Servicios. Por lo tanto, República Checa y Hungría se clasificaron en última posición.
Conclusiones
En primer lugar, e independientemente de su nivel de seguridad y servicio, los inspectores se dieron cuenta de que había muy pocas zonas de aparcamiento en general, teniendo en cuenta el rápido crecimiento del volumen de transporte de mercancías en las autopistas europeas.
El estudio muestra que existen zonas de aparcamiento seguras en Europa. Hay algunas que puntúan muy bien, pero existe gran cantidad de ellas que no puntúan en absoluto. De las 20 instalaciones con mayor puntualidad en Seguridad, 16 manifestaron su interés en contar con una certificación oficial.
Según los datos recogidos por los inspectores, la mayoría de las zonas de aparcamiento sometidas a estudio estaban dotadas de restaurantes y tiendas. Lo que faltaba con frecuencia eran productos y servicios dirigidos especialmente a los conductores de vehículos pesados, como lavanderías, sistemas de lavado de camiones o tiendas de venta de recambios.
En esta competencia internacional, dos aparcamientos destacaron por encima de los demás: el de Ashford International Truckstop, cerca de Dover, en Reino Unido, y Autoparco Brescia Est, cerca del lago de Grada, en Italia. Y todo porque sus plazas de aparcamiento en zonas de descanso están bien iluminadas, protegidas por verjas altas, fáciles de vigilar por las cámaras y el personal de seguridad.
En ambas instalaciones, las entradas y salidas están protegidas por portones cerrados o barreras levadizas; el personal está presente las 24 horas del día y existe un sistema de teléfonos de emergencia. Además, hay zonas de aparcamiento separadas para vehículos pesados y turismos y el diseño de la zona peatonal cumple con las normas de seguridad vial.
Los inspectores comprobaron que en ambos aparcamientos, las instalaciones sanitarias están limpias. Además de restaurantes con menús variados, hay cierto número de oferta recreativa e instalaciones específicas para vehículos pesados, como tomas de electricidad para equipos refrigerados, que es una prestación poco habitual.
Deficiencias
En cuanto a las carencias o puntos negativos, los inspectores encontraron varios: no se suelen registrar entrada o salida de peatones, tampoco se comprueba que las matrículas de los vehículos pesados van asignadas a un conductor (para detectar posibles robos de vehículos). En general, el control de entradas y salidas es demasiado laxo. Muchas zonas de aparcamiento carecen de verjas continuas o de otras barreras, o de sistemas integrales de videovigilancia.
Según el informe, con demasiada frecuencia, los expertos tuvieron motivos para criticar a las zonas de aparcamiento por la deficiente iluminación nocturna, que impedía que el personal controlase todas las actividades. Además, no hubo ni un solo aparcamiento en el que se registrasen y aparcasen por separado los transportes de mercancías peligrosas.
Las tomas de electricidad para vehículos refrigerados o las instalaciones para el lavado de camiones eran escasas y estaban situadas fuera de ellas. También brillaban por su ausencia las tiendas de ventas de recambios para vehículos pesados, los servicios de emergencia o talleres para vehículos pesados y las lavanderías. Además, los sistemas de reserva anticipada fueron muy difíciles de encontrar.
Poca vigilancia
Los inspectores se sorprendieron de que, tan solo en tres aparcamientos, el personal de seguridad les preguntase, qué estaban haciendo cuando se encontraban realizando su trabajo de incógnito. El abanico de ejemplos de la escasa vigilancia incluye barreras abiertas o controles de identificación al entrar durante la inspección diurna, pero ninguna verificación de la identidad de los inspectores durante la noche.
En un aparcamiento del Reino Unido, el inspector terminó su trabajo sin haber presentado ninguna clase de documentación, mientras que en otro, ubicado en Francia, el experto accedió libremente a pie a las instalaciones, simplemente quejándose de que su tarjeta de acceso no funcionaba.