En primer lugar, el ponente, Massimiliano Salini (PPE), hizo referencia a que uno de los asuntos de fondo es la falta de una estrategia real europea sobre la intermodalidad. Identificó cuatro puntos como prioritarios. El primero, clarificar el criterio del 40% de reducción de los costes externos ya que «no está claro cómo se llegó a él, y el sector del transporte pide aclarar el origen de este valor específico».
También detectó incertidumbre sobre la gran cantidad de complicaciones administrativas para acceder a los eventuales incentivos para quienes alcancen el objetivo de reducir el 40% de los costes externos. En tercer lugar, puso en valor la plataforma digital, aunque reclamó ponerla a disposición del transporte «cuando ya esté lista y pueda prestar servicios».
Por último, se refirió a la armonización de los sistemas nacionales para indicar que tampoco se entiende la base del cálculo de la sugerencia de reducción del 10% de los costes externos, expresando que puede que haya países que lo puedan conseguir, pero que habrá otros «en los que es imposible». Concluyó su intervención indicando que «no quisiera que este intento de armonización provocase una menor armonización».
Thomas Rudner (del partido alemán S&D y ponente en la sombra) se muestra de acuerdo con lo expuesto por el ponente en su intervención y en su documento de trabajo, aunque plantea también muchas preguntas. En concreto, pide aclarar el cálculo de los costes y la manera de calcular, por ejemplo, el tiempo pasado en los atascos en carretera. Traslada sobre la plataforma digital que «la industria necesita un poco más de margen de maniobra para poder llevar a cabo la estrategia sobre el transporte combinado».
Sobre los actos jurídicos, solicita un marco temporal específico para pasar de los actos de ejecución de la Comisión Europea a un cálculo efectivo de los costes, y evitar así la incertidumbre de los actores del transporte. Además, se muestra partidario de contar con mayor dotación financiera para garantizar la multimodalidad. Por último, reclama a la Comisión Europea «tener mucho más en cuenta la dimensión social en todo lo que se plantea».
Propuesta para modernizar el transporte combinado
Tilly Metz (Verdes) dio la bienvenida a la propuesta para modernizar el transporte combinado, pero lamenta que le haya llevado tanto tiempo a la Comisión porque «eso ha impedido que se llegue a un resultado en esta legislatura». Como elementos positivos, nombra la perspectiva
nacional sobre el transporte combinado y la competitividad del transporte combinado. Como puntos más negativos, cita al sector para indicar que «ya están cuestionando la definición», y también explica que la innovación de que la evaluación se base en costes externos se refiere también a costes que «soporta la sociedad en su conjunto y no quien contamina».
Asimismo, reclama atender a los criterios de financiación y garantizar que «la información electrónica sea asequible y fácil de utilizar». Reivindica «evitar el riesgo de que, al final, el ferrocarril sufra una desventaja competitiva, que es lo que podría colarse con esta propuesta», y solicita tener en cuenta las zonas medioambientalmente sensibles para prever normas específicas.
También interviene una representante del Comité Económico y Social Europeo (CESE) para mostrar su apoyo a la revisión de la directiva puesto que considera que «necesitamos fomentar la multimodalidad en todos los tipos de transporte al tiempo que garantizamos nuestra obligación de coordinar y optimizar todos los modos de transporte en Europa». Cree que esto ayudará a reducir las emisiones y se garantizará la flexibilidad para los servicios.
Sin embargo, se muestra firme argumentando que «esto no lo vamos a conseguir si eliminamos el transporte por carretera de todas las distancias cortas o medias», defendiendo la importancia del diálogo entre todas las terminales y la transparencia en cuanto a la operación en terminales, sus instalaciones y sus servicios.
Considera que la metodología para el cálculo de costes externos y la lista de operaciones intermodales alternativas «se deberían incluir como anexo y no tanto como acto de ejecución» para reducir el período de transposición a menos de los 30 meses previstos. Por último, se refiere a la necesidad de contar con trabajadores cualificados y que contribuyan al transporte intermodal.
Por parte de la Comisión Europea, una representante de la Dirección General de Transporte (DG MOVE), agradece el apoyo del Parlamento a la idea de que el transporte intermodal es una manera de ecologizar el transporte de mercancías en la Unión Europea. Reconoce que el punto más planteado por los actores del sector es de dónde viene la definición establecida en el texto. Defiende la propuesta haciendo referencia al objetivo de reducción de los costes externos y la ecologización, e indicando que «eso no lo podemos incluir con criterios basados en la distancia».
Sobre la cifra concreta, indica que «el 40% es un umbral mínimo y los Estados pueden ir más allá». Sobre el proceso, para contrarrestar la preocupación de que es demasiado complejo o burocrático, sostiene que «con la nueva plataforma y el uso de documentos electrónicos y nuevas tecnologías en el transporte de mercancías tenemos nuevas oportunidades y tenemos que aprovecharlas».
Para cerrar el debate, intervino de nuevo el ponente Massimilano Salini (PPE), y agradeció el intento de aclarar el asunto del 40% de los costes externos. Pidió no olvidar que el propósito del transporte combinado «no es reducir las emisiones, sino permitir transportar las mercancías al mercado interior europeo de manera que se favorezca la competitividad de este mercado y, al mismo tiempo, la sostenibilidad».
Por un transporte de mercancías eficiente y sostenible
Por ello, indicó que el primer objetivo que hay que fijarse es «garantizar a la economía europea un sistema eficiente, eficaz y sostenible de transporte de mercancías» y que, si el objetivo de la sostenibilidad entrara en conflicto con la competitividad, «habría que resolverlo, pero no imponer al sector del transporte europeo un vínculo adicional sin ocuparse del problema de la competitividad». Concluyó su intervención recordando que «el sistema europeo sigue siendo el más sostenible del mundo, mientras está perdiendo puntos de competitividad en el mercado global».
En el apartado de votaciones, se aprobaron los acuerdos interinstitucionales alcanzados sobre la Modificación de la Directiva sobre el control de los buques por el Estado rector del puerto, y sobre la Modificación de la Directiva sobre el cumplimiento de las obligaciones del Estado de abanderamiento.
Además, se informó del acuerdo interinstitucional provisional alcanzado sobre la propuesta Directiva que modifica la Directiva (UE) 2015/413, por la que se facilita el intercambio transfronterizo de información sobre infracciones de tráfico en materia de seguridad vial. El ponente Kosma Złotowski (ECR) considera que el acuerdo es satisfactorio para el Parlamento y animó a aprobarlo, dado que con él se van a «reforzar los derechos de los conductores que cometan infracciones en otro Estado miembro».
Los infractores recibirán las multas impuestas en sus respectivos idiomas, se describirán los recursos posibles, y se podrá acceder a informaciones detalladas en línea. Además, se ha ampliado el ámbito de aplicación, establecido un plazo de 11 meses para todo el procedimiento, y será el organismo público el encargado de contactar con la persona infractora.