
Las dos empresas colaboraron para probar el rendimiento de los vehículos BEV y FCEV a través de entornos controlados y simulaciones en carretera con dinamómetro, capaces de simular una amplia gama de ciclos de trabajo.
Para realizar las pruebas se utilizó el equipo de repostaje de hidrógeno de Nikola junto con un flujo constante de hidrógeno suministrado por el centro para permitir la realización de pruebas ininterrumpidas. La evaluación de los vehículos comprendió la supervisión de la gestión de la batería y pruebas de climatización que aprovecharon la simulación solar para reproducir temperaturas extremas.
Allison, socio preferente
El Centro VE+ET ofrece muchas ventajas a los fabricantes de equipos originales, como la posibilidad de realizar las pruebas en un entorno seguro, controlado y coherente que permite obtener resultados seguros, fiables y reproducibles. En las instalaciones, Allison simula condiciones climáticas y aplicaciones del mundo real, lo que permite a los OEM reducir los plazos de desarrollo y validación de productos para lanzar al mercado tecnologías y sistemas de vehículos innovadores de forma más rápida y eficiente.
Las dos empresas colaboraron para probar el rendimiento de los vehículos BEV y FCEV a través de entornos controlados y simulaciones en carretera con dinamómetro
Además, la realización de pruebas en un período condensado que no depende de las condiciones climáticas estacionales ni de las condiciones de la carretera se traduce en una reducción de los costes en comparación con las pruebas en carretera.
El Centro VE+ET, de más de 5.500 m2, es el único de su clase en el Medio Oeste y ofrece la posibilidad de realizar pruebas durante todo el año en una ubicación centralizada. Las instalaciones ofrecen cámaras y series de pruebas específicas para los clientes, que proporcionan las capacidades y la colaboración necesarias para el desarrollo de nuevos productos. Para obtener más información sobre el Centro VE+ET, es posible hacerlo a través de allisontransmission.com/veet.