Como se recordará, Taguas estuvo al frente de la Oficina Económica del presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, cargo en el que sustituyó al hoy ministro de Industria, Miguel Sebastián.
Su nombramiento en Seopan levantó una polvareda política de órdago. ¿Se puede saber, señor Taguas, por qué está tan interesado en que nos suban el combustible, en nada menos que 11 céntimos el litro? Ya puestos, ¿por qué no pide 20 ó 30?
Con independencia de para qué quiere usted (o sus empresas) el dinero, aunque se supone que para hacer “obras”, ya que se han recortado las inversiones, está claro que, a pesar de su magnífica formación y su trayectoria profesional, no ha pensado cabalmente en las consecuencias de su ocurrencia, no sólo para el transporte de mercancías por carretera, sino para la depauperada economía nacional y nuestra competitividad.
Meta, por favor, al “genio de la lámpara” donde estaba y déjenos en paz.