
Este acuerdo se basa en el gran potencial de crecimiento que tiene el mercado ruso de gas natural. El cambio del diésel al GNC supone un paso decisivo en materia de propulsiones alternativas y va a permitir que las empresas rusas que operan en sectores clave de la economía puedan lograr una importante reducción en el consumo de combustible, a la vez que fortalecen la seguridad energética nacional protegiendo el medioambiente.
Iveco y Gazprom van a llevar a cabo una serie de programas de investigación y desarrollo de vehículos con motores de metano. Ambas empresas pretenden desarrollar propuestas económicas para expandir el uso de los vehículos de GNC, tanto a nivel regional como nacional, así como organizar campañas para fomentar el uso del gas natural como el mejor combustible alternativo para vehículos industriales.
Por su parte, Iveco va a suministrar a Gazprom vehículos propulsados por gas natural para sus pruebas, que estarán también presentes en exhibiciones y muestras nacionales e internacionales.
Uno de los objetivos de Gazprom es abrir nuevas estaciones de suministro de gas natural en Rusia a medida que el parque de vehículos de este tipo vaya creciendo.