Con el nuevo modelo, que tiene una tara de 5.000 kilos, este vehículo llega a su tercera generación, y además de reducir el consumo, se ha mejorado su estabilidad y la ergonomía para el operador, con una nueva disposición, de los equipos (mangueras y equipos de seguridad) y conseguido más espacio para la colocación de equipos, herramientas, etc.
En su derarrollo se ha utilizado inicialmente un software de simulación de dinámica de fluídos (CFD), que permitió identificar los puntos críticos para reducir la resistencia aerodinámica.
Después, en el prototipo, que ha recorrido más de 5.000 kilómetros durantes los ensayos y que ya ha puesto a prueba la empresa Transportes J. Amaral, se han introducido cambios significativos en el perfil de la cisterna. Las áreas en las que más se ha intervenido han sido la parte delantera del tanque, la parte trasera, el castillo y los laterales. El modelo para el mercado español estará disponible a partir del mes de septiembre.