
Siempre se ha dicho de la profesión del periodismo que buscar la noticia debe estar en el ADN de quien se dedica a esta noble tarea, independientemente del ámbito en el que realice su trabajo. Y, lógicamente, en el sector del transporte de mercancías por carretera no se iba a ser menos; por eso estamos ‘aquí’.
Ocurre que hace ya bastante tiempo que precisamente la noticia es difícil de encontrar; vamos que no hay noticia, o lo que es lo mismo, seguimos sin saber a qué atenernos en muchos de los asuntos que llevan demasiado tiempo en el limbo y que realmente no les voy a enumerar por no ‘aburrirles’, en tanto que son de sobra conocidos y desde estas mismas páginas les hemos venido informando sobre ellos de forma puntual.
Uno que sí ha tenido solución en los últimos días es la definición -¡por fin!- del límite de facturación anual del régimen de módulos para los transportistas en este 2025. Y es que, a punto de finalizar el primer trimestre del año, la no convalidación en el Congreso de los Diputados el pasado mes enero del Decreto-ley Ómnibus que, entre otras medidas, contemplaba la prórroga un año más del límite de facturación anual para poder continuar acogido a dicho régimen, dejaba a más de 30.000 autónomos sin seguridad jurídica en este aspecto.
El caso es que, a pocos días del 1 de abril, con todo lo que ello implicaba en tanto que estos profesionales debían presentar su primera declaración tributaria trimestral, el Ministerio de Hacienda aprobó una nota informativa confirmando una prórroga del régimen estimación objetiva vigente en los ejercicios 2016-2024, manteniéndose el límite en los 125.000 euros facturados en 2024; algo es algo.
Lo que no tiene buena pinta es el posible y anunciado incremento de la fiscalidad del gasóleo para equipararla a la de la gasolina. Y es que, tal y como hemos venido contando, las intenciones del Gobierno parecen claras en este sentido, y lo que en un principio era una declaración de intenciones tiene viso de convertirse en realidad más pronto que tarde, escudándose la Administración en que “desde Europa nos obligan a ello”. Incluso las últimas noticias son que antes de Semana Santa este asunto debe estar resuelto; ¿Comisión Europea dixit? Eso está por ver y no parece nada claro, por mucho que el Ejecutivo así lo asegure.
Si hablamos de más afán recaudatorio, no podemos dejar de hablar de los peajes, los dichosos peaje
Vuelvo a referirme a ello porque el Consejo de Ministros aprobó el pasado 18 de marzo el Real Decreto que traspone la Directiva europea por la que se establecen los criterios para calcular los gravámenes y bonificaciones por el uso de la red vial.
Así y todo, dicha Directiva introduce cambios en el método de cálculo de los peajes, así como la posibilidad de internalizar los costes de congestión y los externos por emisiones de CO2. ¿Estamos más cerca entonces de la aplicación de un nuevo gravamen? Pues parece ser que no si nos atenemos a lo que ha comentado al respecto el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, quien ha descartado la posibilidad de implantar nuevos peajes en la red de carreteras del Estado, manteniéndose la política de bonificaciones actual. En cualquier caso, el sector vuelve a estar con la ‘mosca detrás de la oreja’, y no es para menos.
Un Óscar Puente que, por cierto, atendió a la invitación de Difundalia de estar presente en el ‘3er Congreso Nacional de la Mujer en el Transporte’ para clausurarlo. Desde aquí, gracias, y también a María Nieves González, directora general de Trabajo del Ministerio de Trabajo y Economía Social, que inauguró el evento.
Un congreso que se ha convertido en una referencia a pesar de haberse celebrado tan solo tres ediciones del mismo, pero que puso de manifiesto una vez más que la presencia de la mujer en el sector en todos sus ámbitos cada vez es mayor, pero que hay que seguir luchando por la igualdad de género.