Los ministros de Transportes de la Unión Europea no han tardado más que cinco días en celebrar una reunión extraordinaria para tratar los efectos de esta crisis, que ha supuesto importantes pérdidas para las compañías aeronáuticas y ante la cual, los viajeros han debido improvisar las soluciones más rocambolescas para acceder a sus destinos.
Los ministros acordaron reforzar una respuesta europea coordinada a la crisis, a través de la Comisión y de Eurocontrol, que permita a los diferentes Estados miembros abrir su espacio aéreo, garantizando plenamente la seguridad de los vuelos. Asimismo, han solicitado a la Comisión que contribuya a favorecer una ágil coordinación que permita la movilidad de los ciudadanos europeos a través de medios de transporte alternativos.
La erupción del volcán islandés ha tenido importantes consecuencias en la celebración Bauma 2010, en la que participan como expositores los fabricantes de vehículos industriales y accesorios. La feria de la construcción, que se celebra en Munich (Alemania), ha visto considerablemente mermado el nivel de visitantes extranjeros.
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