El Ministerio de Fomento, en colaboración con la Dirección General de Tráfico, ha decidido que a partir del segundo trimestre del año, los camiones no podrán volver a circular por las principales carreteras convencionales, para pasar a circular obligatoriamente por autopistas de peaje.

Los argumentos dados por Fomento para justificar esta medida está la "previsible" disminución de la siniestralidad en carretera, en la que están involucrados camiones. Para ello, el Gobierno financiará hasta el 50% del importe del peaje y el 35% del importe en los trayectos adicionales en los que el transportista decida seguir por la vía de peaje, aunque en ese tramo ya no esté vetada la alternativa gratuita.

Se prevé que la medida provoque un aumento del precio del transporte y, por lo tanto, un aumento de los ingresos de las empresas que gestionan las autopistas de peaje, varias de las cuales ya han sido rescatadas por el Gobierno ante su falta de liquidez y su quiebra técnica.

Las preguntas que el diputado Cantó va a presentar son las siguientes:

- ¿Ha consensuado el Gobierno esta medida con los colectivos de los transportistas?

- ¿Cuáles son los tramos en los que el Gobierno tiene pensado implementar esta medida?

- ¿Qué impacto económico ha evaluado que tendrá con relación a los precios del transporte?

- ¿Considera el Gobierno insuficiente la inyección de liquidez que supuso el rescate a las autopistas para ahora proceder a financiar sus peajes?