El presidente de la Confederación Española de Transporte de Mercancías, CETM, Marcos Montero, intervino para decir que no cree en el reequilibrio artificial de los modos de transporte, y que debe ser el mercado quien elija el modo que más le convenga.

A su juicio, el cliente natural del sistema Intermodal (ferroviario y marítimo) debe ser el transportista por carretera; se precisan más barcos y trenes más rápidos y eficientes, así como incrementar las obras públicas para mejorar los accesos, reduciendo tiempos y costes. Acabar con las subvenciones del Estado y cambiar la política perversa del Libro Blanco, son objetivos vitales.

Alfredo Irisarri, Socio Director de Teirlog Ingeniería, explicó que ha habido liberalización para la carretera y el transporte marítimo, pero no para Renfe, y expuso las condiciones que pide la carretera al modo marítimo, indicando que si se dan subvenciones, deben ser para todos.

El Director General de Gefco, Dulsé Díaz, destacó que la clave del Intermodal es buscar sinergias, siendo rentable el marítimo si el puerto está cerca, con un ahorro en este caso del 25%; sólo con trenes completos es rentable el modo ferroviario, aportando la carretera innovación, flexibilidad y calidad.

Ya en la mesa redonda, Juan Vega, Viceconsejero de Infraestructuras del Principado de Asturias, estuvo crítico con el Gobierno central, en cuanto a su política de infraestructuras, como el acceso a los puertos por ferrocarril. El Presidente de la Autoridad Portuaria de Gijón, Emilio Menéndez, habló de los futuros corredores diseñados en la UE, aunque criticó la situación de marginación de la ZALIA.

Juan Riva, Presidente de Flota Suardiaz, señaló la importancia de la intermodalidad y de la colaboración entre los diferentes modos, así como las ayudas públicas para el SSS, si se quiere duplicar el servicio (como es el caso de Gijón), lo que exigiría el compromiso del cliente. El Operador Ferroviario, representado en este caso por el Director General de Acciona Rail Service, Bruno Torresano, busca también alianzas con la carretera, incidiendo en que la empresa pública (en referencia a Renfe) debe coexistir con la privada, sin subvenciones.

Borja de Torres, Consejero Delegado de ACOTRAL, señaló que la intermodalidad supone una oportunidad para abrir nuevos mercados, pero que este sistema funciona cuando se habla con la carretera.

Por último intervino el Presidente de ACTE, Ramón Vázquez, quien se mostró insatisfecho con las pretensiones del Libro Blanco y de las administraciones nacionales, quienes “machacan” al camión.

El Presidente de ASETRA y organizador del evento, Ovidio de la Roza, apostó por el liderazgo y protagonismo de la carretera en el transporte Intermodal, vital para el desarrollo del comercio exterior. En su opinión debe liberalizarse el ferrocarril y aún más el monopolio que ejerce Renfe, indicando que las administraciones deben poner en valor el transporte por carretera, eliminando aquellas medidas que supongan un incremento de costes para este modo de transporte, como la Euroviñeta y otras barreras a su desarrollo.

Clausuró el acto (en el que estuvo presente la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón), Francisco Álvarez-Cascos, Presidente del Gobierno del Principado de Asturias, quien afirmó que es la carretera quien más tiene que ganar con la Intermodalidad, que debe sufrir reformas en cuanto a reglamentación e infraestructuras.

Rechazó la política ferroviaria española, que repercute negativamente en la eficiencia del sector del transporte de mercancías por carretera, debido al mantenimiento de un ancho de vía ibérico, que sólo beneficia a Renfe. Indicó, por último, que Asturias permanecerá aislada con esta filosofía (habló de la variante de Pajares) y que su Gobierno mantiene unas mínimas tasas de morosidad, pretendiendo dar respuesta a la atomización del transporte en el Principado y ofreció su apoyo para la celebración de futuras ediciones.