Una vez que la fábrica esté plenamente operativa, sus cerca de 100 trabajadores podrán producir más de 20.000 sistemas de propulsión híbridos para camiones al año.
El nuevo sistema de propulsión híbrido de Allison acumula la energía cinética que, de otro modo, se perdería en el proceso de desaceleración del vehículo, para reutilizarla más tarde a la hora de acelerar de nuevo el vehículo. Asimismo, la energía recuperada puede usarse para poner en funcionamiento los accesorios del vehículo.
En términos generales las mejoras en el consumo de combustible de los productos híbridos de Allison oscilan entre un 20- 30%.
“Allison Transmission y el Departamento de Energía han trabajado juntos durante muchos años en el desarrollo de programas que han impulsado la tecnología de la industria del transporte y cuyo resultado ha sido la fabricación de productos reales que nos benefician a todos” afirmó Lawrence E. Dewey, Presidente y Director General de Allison Transmission, ante los trabajadores, miembros del gobierno, autoridades estatales y locales, y colaboradores del proyecto presentes en la inauguración.
“Se han invertido más de 130 millones de dólares en la renovación de estas instalaciones y el desarrollo de nuestros nuevos productos híbridos para camiones. Pondremos a disposición del sector del transporte una nueva generación de soluciones de propulsión híbridas”.
La subvención de 62,8 millones de dólares del Departamento de Energía Estadounidense (DOE por sus siglas en inglés), concedida en virtud de las disposiciones de la Ley de Recuperación y Reinversión Americana de 2009, permitirá a Allison anticipar el lanzamiento comercial de los productos híbridos para camiones en 2013.
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