
Pero de todas ellas, la que recuerdo con gran interés fue el anuncio de la creación de la Unidad Logística (órgano de coordinación de todos los departamentos de Fomento en la fijación de objetivos, su desarrollo y financiación, con el fin de acabar con las taifas interiores de la Gran Taifa de Fomento, incrementando la eficiencia en las inversiones financiadas con dinero público, o sea, el que nos extraen a todos). Ya sólo su fundamento y finalidad eran de loa y aplauso unánime por propios y extraños. Para la foto se utilizó la simultánea constitución del Foro Logístico (órgano de interlocución de, digamos, la sociedad civil o sea, la que se paga sus propios gastos: usuarios, profesionales, empresarios, etc.). Perfecto, todos contentos y con foto incluida al pie de las escaleras del Ministerio.
¿En qué devino el oropel? Les aporto algunos hechos y opinión: Le dije: señora Ministra, estas iniciativas me parecen muy acertadas y necesarias, pero espero no queden en el baúl de los recuerdos y se acometan sin demora. Me contestó: naturalmente, lo verán ustedes. Más: el secretario de Estado, Rafael Catalá, responsabilizado del proyecto por la Ministra Pastor, puso en marcha varios grupos que empezaron a trabajar con entusiasmo; personalmente participé en el estudio de los TILOS, coordinado por Juan Miguel Sánchez que hizo un trabajo muy interesante, no sólo analizando la realidad de las terminales, sino detectando los fallos operativos y aportando soluciones de perfeccionamiento para su viabilidad (el trabajo puede verse, pues está publicado). También se hizo un estudio exhaustivo sobre los corredores ferroviarios, estudio presentado y coordinado por Antonio Pérez-Millán en la Comisión de Intermodalidad, siendo Ramón Vázquez miembro activo y experto en transporte ferroviario, quien dedicó mucho tiempo y conocimiento, en especial a los corredores transeuropeos analizando dicho estudio, razonando las críticas al mismo y aportando soluciones contrastadas que deberían incorporarse para que fuese sostenible económicamente. Brillante estudio, aunque a mi juicio algunos datos colisionaban con otro de elaboración paralela, lo que en absoluto merma su mérito.
¿Qué pasó con todo esto?
Curiosamente, todo se paró, y en seco, cuando al señor Catalá le nombran ministro de Justicia, y algunas voces de compañeros dentro del Consejo Nacional de Transportes dijeron: no hay problema, no pasa nada, la Ministra pondrá a otro y todo continuará viento en popa. Recuerdo cuando expresé mis dudas al optimismo de mis compañeros de Consejo, incluso escribí un artículo sobre ello: Teatro, puro Teatro.
Resumiendo: Después de casi cinco años debemos reconocer a la señora Ministra, que lo fue de Fomento, su destreza para conservar una imagen muy buena (envidiable y poco común como político) de trabajadora, inteligente, capaz etc., etc., dentro del ejecutivo; pues bien, en cuanto al transporte y la logística he de decir que aplica mucho marketing y pocos, poquísimos hechos, cinco años perdidos y diez para recuperarse. Ya decían nuestros clásicos: una cosa es predicar y otra dar
Así las cosas, no es de extrañar que el líder de la oposición parlamentaria pidiera en su primera comparecencia la reprobación de la ex-ministra en su nueva función de presidenta del Parlamento. Más marketing no, señora ex-ministra, por favor.
Revista Transporte Profesional