
El 8 de abril, Scania presentó una demanda ante el Tribunal de Justicia Europeo mediante un recurso de casación que, una vez sea resuelto, en caso de que sea desestimatorio, abriría la vía judicial para que todos los afectados que adquirieron un camión de Scania, puedan interponer las correspondientes reclamaciones por los perjuicios ocasionados, debido a la responsabilidad solidaria por la actuación conjunta de los fabricantes en la concertación de los sobreprecios aplicados en la venta de camiones en toda Europa durante el período que duró el cártel.
Cártel de camiones en Europa
La sanción impuesta a Scania fue la de mayor importe económico que la Comisión Europea impuso a las marcas participantes en el cártel europeo, superando a las multas impuestas a cada uno de los cinco restantes fabricantes europeos participantes en el cártel (DAF, Daimler-Mercedes, Iveco, MAN y Renault-Volvo), todas ellas motivadas por haber quedado probado que, entre 1997 y 2011, concertaron la fijación en los precios de venta de dichos vehículos en perjuicio de sus clientes transportistas, y retrasaron de manera deliberada la introducción en el mercado de nuevas tecnologías para reducir las emisiones de sus vehículos, lo que conllevó una multa récord por un importe cercano a los 4.000 millones de euros entre todas las marcas.