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Observar a los nuevos LF y CF, o lo que es lo mismo, la propuesta de DAF para la distribución (7,5-19 Tn.) por un lado, y para la mediana y larga distancia (18-44 Tn.) destinada a todo tipo de aplicaciones por otro, es como tener ante nuestros ojos a la serie XF. Y es que los ingenieros de DAF han debido han debido aplicar esa lógica tan española que reza que “lo bien hecho bien parece” a la hora de desarrollar la última generación de estos dos modelos, pues el parecido entre los vehículos es asombroso.
Como gotas de agua
Comenzando por el exterior, el formato es idéntico: parrilla de grandes dimensiones buscando una mayor refrigeración del motor, parachoques de acero galvanizado -con luces angulares opcionales- cuya robustez es a prueba de daños. También son nuevos los faros tipo LED integrados con luz diurna incluida.
En líneas generales se trata de un diseño muy atractivo, en el que destaca sobremanera el gran logo central de DAF sobre panel cromado. Todo ello con una delineación con la que se ha buscado claramente optimizar la aerodinámica del vehículo.
Pasar al interior es hacerlo a un espacio totalmente renovado, en el que se ha tenido en cuenta en todo momento la funcionalidad y la habitabilidad, siempre considerando a quien tiene que pasar un gran número de horas al volante.
Así, desde los novedosos asientos, con múltiples opciones de regulación y nuevo tapizados, pasando por el propio volante –idéntico en los dos casos al del XF-, desde el que se pueden manejar múltiples funciones de los vehículos (radio, teléfono, control de crucero, control de velocidad de bajadas, etc.) y terminando por todo el panel frontal todo es de nueva generación.
En este sentido, el panel de instrumentos del LF se ha rediseñado por entero, mientras que el del CF sugiere una líneas maestras totalmente diferentes a las que sugería el modelo a sustituir buscando siempre la mayor ergonomía posible. De tal forma, se han agrupado los diferentes dispositivos de control en base a las diversas funciones que integran los vehículos.
Señalar que entre los dos relojes principales se emplaza una pantalla de cinco pulgadas –configurable para 32 idiomas- desde la que se controla todas la funciones vitales de motor y camión en general. Asimismo, ambas consolas centrales integran dos y tres ranuras, respectivamente, de manera que se puede incorporar opcionalmente el sistema DIN TNR de DAF que incluye reproductor de sonido, navegador y puerto USB.
Para todos los gustos
Pero la esencia del LF y el CF, radica en los novedosos propulsores Euro 6, que parten de un nuevo bloque motor que recurre a la recirculación de gases de escape EGR, a la tecnología SCR de postratamiento de los mismos y a un filtro de partículas que aumenta al máximo la regeneración pasiva. Todo ello asegura un perfecto control sobre las emisiones, además de un excelente rendimiento a nivel mecánico.
Entrenado más en detalles, destacar que la totalidad de los motores equipan common rail de última generación con turbo de geometría variable. Además, todos ellos incorporan una única correa en V y un ventilador montado directamente en el árbol de levas sin accionamiento intermedio, lo que se traduce en una clara disminución de los costes de mantenimiento, del peso del conjunto y del consumo del combustible. Una tara que también se ve reducida por el hecho de que el cárter del aceite se ha fabricado en material sintético, particularidad que también tiene mucho que ver en los menores niveles de ruido.
Con todo, la gama de mecánicas se articula alrededor de dos grandes grupos, la serie PX para los LF y la serie MX asociada a los CF. En cuanto al primer grupo, dos son las posibilidades que ofrece PACCAR, el PX-5 de 4,5 litros de cilindrada y cuatro cilindros para potencias entre 150 y 210 CV, y el PX-7 de 6,7 litros de capacidad y seis cilindros que entrega potencias entre los 220 y los 310 CV.
Por su parte, el CF admite el MX-11 de 10,8 litros para potencias declaradas que van desde los 290 a los 440 CV y el MX-13 de 12,9 litros que desarrolla potencias de 410, 460 y 510 CV. Unos motores que además de por un excepcional rendimiento sugieren un alto par motor a bajas velocidades y en un amplio espectro del cuentavueltas.
Gran capacidad de carga
Pero las novedades no se acaban aquí, en tanto que también afectan al chasis y en consecuencia a la capacidad de carga de los vehículos. Por lo pronto el CF incorpora un eje trasero más ligero para combinaciones de peso de hasta 44 Tn. y pares motor de hasta 2.300 Nm. Además, el mismo tren trasero incluye función de estabilización antivuelco en la suspensión, de manera que se ve favorecida la estabilidad del vehículo, siendo también el peso más reducido. Kilos que igualmente se ganan gracias a la nueva placa de montaje para la quinta rueda, a la recolocación de los compartimentos de las baterías y al novedoso mecanismo de la dirección. Por otra parte, la reubicación del depósito de AdBlue y las mismas baterías posibilita montar un mayor depósito de combustible, de hasta 1.500 kilos.
En el caso del LF, la innovación de mayor consideración guarda relación con la nueva estructura del chasis, construido en acero de alta calidad en una sola pieza (monocasco) que también reduce al mínimo el peso.
Señalar ya por último que el primer vehículo en entrar en producción será el CF con motor PACCAR MX-13, que será una realidad el próximo mes de junio. En otoño llegarán los CF MX-112, mientras que el LF llegará en el último trimestre de 2013.