REVISTA TRANSPORTE PROFESIONAL
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Tanto la asociación ANET, integrada en Conetrans, como Tradisna, creen que existen razones más que sobradas para decir "no" al desvío de camiones por las carreteras nacionales y hacerles utilizar la autopista A-15. Aún así, las causas las han resumido en ocho:
1º Costes por distancia
Hay que destacar que el desvío por la A-15 significa hacer una ruta con más kilómetros (unos 36 adicionales). Teniendo en cuenta que el coste directo de un vehículo pesado está en 1,245 euros/kilómetro recorrido (ver el último Observatorio de Costes de Transporte de Mercancías del Ministerio de Fomento), se produce un incremento de coste en el trayecto de 44,82 kilómetros. A mayor coste de transporte, menor competitividad de los productos españoles en el mercado.
2º Costes por peaje
Hace pocos meses, las asociaciones de transporte denunciaron en todas las instancias (Parlamento de Navarra incluido) la aplicación en Guipúzcoa de peajes en determinadas vías. Hoy, el coste que supondría circular por este desvío ascendería a 10,7 euros por el conjunto de peajes, en el caso de transporte de más de 12 toneladas.
3º Costes por tiempo
El incremento del tiempo de conducción ascendería a unos 20-25 minutos, por los 36 kilómetros de más que representa este desvío. Esto supone que, debido a las limitaciones de los tiempos de conducción y descanso obligatorios para el transporte, algunos transportistas nacionales no pueden llegar a sus domicilios o destinos, con los costes que ello supone, tanto personales como profesionales.
4º Peligrosidad de la A-15
La alternativa propuesta (A-15) es una ruta que puede calificarse también como peligrosa, por la orografía del terreno. Existen frecuentes desniveles que dificultan la conducción los vehículos pesados, que llegan a las 40 toneladas. Por ello, además, el vehículo "sufre" un mayor desgaste de elementos como los frenos, suspensiones, neumáticos, etc., lo que incrementa el coste de mantenimiento.
5º Impacto negativo para la zona
El desvío de tráfico hacia la A-15 afectará a las gasolineras ubicadas en la N-121-A, ya que dejarán de repostar miles de camiones. A eso hay que añadir el impacto negativo que tendrán los locales hosteleros, restaurantes y bares de la zona, y también los talleres mecánicos.
6º Menor recaudación fiscal para Navarra
Algo parecido sucederá con las arcas forales, ya que el Gobierno de Navarra obtendrá una menor recaudación fiscal. Según ANET, unos 2.800 vehículos pesados transitan cada día por la N-121-A, en su mayoría, articulados. Si, al menos, un 40% de ellos repostaban en el último tramo de esta vía, se dejarían de vender unos 1.155.000 litros diarios de gasóleo en Navarra. Sólo la reducción de la recaudación fiscal por este concepto sería una consecuencia muy a tener en cuenta.
7º Analizar el origen de la siniestralidad
Según recientes estadísticas del Ministerio de Fomento, los accidentes de tráfico no están causados solamente por transportistas. Es más: no son los principales causantes.
8º El incremento del tráfico rodado era deseado
Todas las asociaciones de transporte quieren que aumente el tráfico rodado, ya que, desde el sector del transporte están detectando un incremento de la actividad derivada de la mejora económica y, por lo tanto, un mayor tráfico. Ambas asociaciones recuerdan que esta mejoría también repercute en el tráfico de turismos por movilidad laboral.