
Algunos, como el alcalde de Ezkabarte, Pedro Lezáun, han asegurado que no quieren criminalizar a los camiones. Si bien los datos que ha facilitado la Policía Foral revelan que en los últimos cuatro años se han producido 12 accidentes mortales, sólo en uno de ellos la responsabilidad fue de un camión. Ante estas referencias, resulta complicado no pensar que, una vez más, se trata de otro caso en el que los camiones vuelven a cargar injustamente con la culpa ante la inseguridad que se vive en la Red Vial.
La CETM, en consonancia con su asociación en Navarra, ANET, quiere recordar a los ayuntamientos de dichas localidades que existen más soluciones que la de desviar el tráfico de vehículos pesados a una autopista de peaje como es la AP-15.
Para evitar la mortalidad en las carreteras es necesario aumentar la inversión en el mantenimiento y la mejora de las infraestructuras, implantar más radares sobre todo en los puntos negros, intensificar la vigilancia, etc. Medidas que el Gobierno de Navarra ha aprobado hace poco y llevará a cabo a lo largo de este año.
"Existen más soluciones que la de desviar el tráfico de vehículos pesados a una autopista de peaje, como es la AP-15" CETM
Para la CETM, "prohibir la circulación a los camiones en la N-121-A no sólo sería un error, sino una demostración más de que señalar a los vehículos pesados como los responsables de la mortalidad es la salida más fácil y recurrida, en lugar de buscar soluciones sensatas y efectivas que respeten el derecho a la libre circulación y, al mismo tiempo, reduzcan el número de fallecidos".
El desvío obligatorio de camiones a la AP-68 es un claro ejemplo de que seguir ese camino es un error pues, a pesar de la prohibición para que los vehículos pesados circulen por la N-232, el número de accidentes mortales ascendió en 2019. Cabe recordar que, tras el recurso de la CETM, el Tribunal Supremo y el Tribunal Superior de Justicia de Madrid han declarado la ilegalidad de dicho desvío.