
En concreto, esta propuesta de restricción se aplicaría tanto en la AP-1 como en la N-I todos los domingos desde el 7 de junio hasta el 13 de septiembre, además de los domingos 22 de marzo, 3 de mayo, o los lunes 12 de octubre y 2 de noviembre y el martes 8 de diciembre.
Para las asociaciones de transporte, esta medida limitará de forma importante la actividad que los transportistas españoles llevan a cabo en los mercados europeos, que representan un tercio de la flota española, ya que la medida planteada supone hacerles perder competitidad en casi la mitad de una jornada diaria. Además, alegan que esto originaría, de forma innecesaria, una congestión de miles de camiones los domingos en las proximidades de la zona de Burgos, sin que existan áreas de estacionamiento y de servicios suficientes para absorber ese incremento de vehículos.
La carta de Pere Navarro a las asociaciones de transporte
El director general de Tráfico, Pere Navarro, ha tratado de justificar por escrito los motivos para adoptar tal restricción. En una carta remitida a las organizaciones de transportistas, el director general señala que dichas restricciones "son el resultado de un estudio muy meditado de un estudio pormenorizado sobre la problemática sobrevenida a raíz de la liberalización del peaje de la AP-1, en diciembre de 2018".
Según los datos que refleja el escrito, en 2019 se produjo un incremento del 24,5% del número de vehículos de todas las categorías que circulan por la vía (en concreto, 52.087 vehículos más en todo el año), que antes usaban el tramo de la carretera nacional N-I paralela a dicha vía de alta capacidad.
Según la CETM, casi el 70% del aumento de tráfico en la AP-1 lo han generado los vehículos particulares y no los camiones
Tanto desde la DGT como desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se han venido estableciendo políticas restrictivas a la circulación de los camiones por las carreteras nacionales, obligándoles, en muchos casos, a utilizar las autopistas de peaje por su mayor seguridad vial y la capacidad de la propia vía, previo pago del correspondiente peaje. Sin embargo, ahora que la circulación por la autopista es gratuita, la Dirección General de Tráfico "culpa" a los transportistas de su utilización y de congestionar la autopista AP-1, sin atender al carácter de servicio público que los vehículos de transporte desarrollan.
En el escrito se manifiesta de forma expresa que, según los resultados obtenidos, "queda muy patente el aumento considerable de vehículos pesados durante las operaciones especiales de fines de semana de verano", pese a que, de los datos aportados por la DGT se constata que, del número total de vehículos que han incrementado su circulación por la autopista, sólo una tercera parte corresponde a camiones. En concreto, 18.612 en todo el año, frente a los 52.087 vehículos totales de más que ha soportado la vía en el último año, frente a 2018.
Pese a ello, la carta concluye con la necesidad de establecer la restricción propuesta, señalando que "sobre la base de los datos aportados, se determina la necesidad de establecer medidas preventivas que mejoren la movilidad y seguridad vial en estos periodos conflictivos".
La reacción de la CETM
La Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) lamenta que los argumentos lanzados por el Comité Nacional de Transporte por Carretera "no hayan servido para nada y el director general de Tráfico ha confirmado su intención de seguir adelante con esta restricción que justifica en el incremento de tráfico que se producido desde la liberalización del peaje de la AP-1 en diciembre de 2018".
"Lo que el director general olvida es que casi el 70% de ese incremento de tráfico lo han generado los vehículos particulares, que son los verdaderos causantes de esta congestión, y no los camiones, como injustamente pretende señalar la DGT con la puesta en marcha de una restricción tan absurda. Desde la CETM queremos hacer público el rechazo absoluto que nos genera esta propuesta sin sentido, que provocará daños irreversibles tanto a nuestro tejido empresarial en particular, como al conjunto de la economía española en general, por lo que estudiaremos la adopción de medidas de choque contra semejante atropello" señalan fuentes de la CETM.