La octava etapa, la primera tras la jornada de descanso, transcurría entre las ciudades de Salta y Belén y supuso entrar las primeras zonas de arena y dunas, donde la navegación del copiloto y la conducción del piloto pusieron a prueba a todas las tripulaciones.

Gerard de Rooy se hizo con la victoria y también con el primer puesto de la clasificación general. El piloto holandés consiguió una ventaja de dos minutos frente a Nikolaev y de cinco frente a Karginov, ambos de Kamaz. Federico Villagra finalizó el día en el sexton lugar.

Para la novena etapa, el Dakar había organizado una etapa una especial de 285 kilómetros cronometrados para las cuatro categorías, con inicio y fin en la ciudad de Belén. Pero las temperaturas de más de 50 grados obligaron a suspender el tramo, cuando solo se habían disputado 178 kilómetros.
El holandés Gerard de Rooy se proclamó de nuevo ganador de la etapa, triunfo que le hace afianzarse en la clasificación general y aumentar la diferencia a casi media hora con el segundo clasificado, el ruso Eduard Nikolaev, y con Villagra y su Iveco Powerstar.

El segundo puesto de la novena etapa fue para Ton Van Genugten, que logró hacer el recorrido en sólo cuatro minutos más que de Rooy. El Kamaz de Karginov logró el tercer puesto.
La decimal etapa trancurrirá entre Belén y La Rioja, atravesando las las dunas de Fiambalá. Por primera vez saldrán juntos los 10 primeros coches, las 10 primeras motos y los cinco primeros camiones.