Según datos recogidos por Universe Discover 2017, la Unión Europea produce el 10% de las emisiones de CO2 con origen en la actividad humana en el mundo. De dichas emisiones, el transporte por carretera realizado por camiones y autocares sólo representan el 6% del total, mientras que más del 40% corresponde a la generación de energía y calefacción y casi un 20% al sector industrial y de la construcción.
El transporte por carretera, excluyendo el profesional, cuenta por el 10% de las emisiones totales de la UE. Según los cálculos realizados por la Asociación, mantener parado todo un año el total del parque de camiones y autocares de la Unión Europea no supondría ni un 1% de reducción de las emisiones globales de CO2 de origen humano en el mundo.
ASTIC ha recordado que en los últimos diez años, la tecnología y la incorporación de los sistemas IT más evolucionados a la flota han permitido que los nuevos vehículos disminuyan sus emisiones de CO2 más de un 20%, por cada ton.km producida, cumpliendo al mismo tiempo con la exigente reglamentación de la Unión Europea en cuanto a emisiones de gases y ruido.
Ramón Valdivia, director general de ASTIC, considera que "el sector del transporte por carretera camina ya por la senda adecuada en la reducción de gases con efecto invernadero, siendo este uno de los grandes retos para el sector".
Desde ASTIC también se propone poner en marcha medidas que ayuden al sector a mejorar la eficiencia energética de las flotas. Entre las que destacan: la eliminación de puntos negros y cuellos de botella, la reducción de las restricciones al tráfico, el incentivo al "rejuvenecimiento" a las renovaciones de flotas, la mejora e inversión en nuevas infraestructuras con mejores trazados que salven los perfiles orográficos y la promoción de la intermodalidad, entre otras.