Desde su posición como nueva secretaria general de Transcalit, ¿cuál va a ser la línea de trabajo a seguir en los próximos meses?

"En Transcalit hemos iniciado un proceso de comunicación y difusión de la federación tanto de tipo interno (socios) como externo (otras empresas, sectores, Administraciones, etc.). El objetivo es dar a conocer y explicar nuestra labor y servicios; ser más visibles, conocidos y cercanos e involucrar en el día a día de la organización a los socios, haciéndolos más participativos".

"También estamos ampliando nuestras colaboraciones con otras entidades, con las que compartimos sinergias, ampliando así la oferta de servicios. Y todo ello sin olvidar la labor institucional de Transcalit, que debe seguir siendo primordial. Mantener, cuidar y ampliar nuestras relaciones con todos los agentes institucionales forma parte de nuestra agenda diaria. Tenemos mucho trabajo por delante en este sentido".

¿Cuáles son los problemas que más les trasladan sus asociados en estos primeros meses del año?

"La actividad económica post pandemia "ha despertado" con fuerza y por tanto la necesidad/demanda de servicio de nuestra actividad es muy elevada. Ajustar los flujos no está siendo fácil en las empresas. Encontrar conductores es muy complicado y ampliar y/o renovar flotas tampoco es sencillo por varios motivos: acceso a financiación, largos plazos de entrega e incertidumbre a la hora de apostar por nuevas tecnologías que sustituyan al diésel, etc. Por otro lado, tenemos unos IPCs muy elevados, con unos precios de la energía y combustibles disparados, que hacen necesaria la negociación de tarifas al alza con los clientes y este punto también está siendo muy, muy difícil. Las relaciones se están tensionando".

"Mantener, cuidar y ampliar nuestras relaciones con todos los agentes institucionales forma parte de nuestra agenda diaria"

Venimos de meses muy convulsos por todo lo acontecido con el incremento exagerado de gasóleo, paro en el transporte provocado solo por algunos pocos, relación con los cargadores, etc. ¿Cómo se está viviendo esta situación anómala en Barcelona, y por extensión, en Cataluña?

"Como he comentado anteriormente, está siendo complicado. La incertidumbre económica nunca favorece a las actividades empresariales, por lo que es necesario encontrar la estabilidad".

¿Hubo problemas para poder realizar el libre ejercicio de la actividad durante las dos semanas que duró esta circunstancia?

"En Barcelona, y en Cataluña en general, vivimos localmente una situación muy diferente a las tensiones vividas en otras zonas de España. Nuestra actividad se pudo llevar a cabo sin problemas y el seguimiento del paro fue anecdótico. Sí es cierto que hubo zonas (Zona Franca Barcelona, ZAL y Puerto) en las que se vivieron momentos tensos, pero desde la federación se pudo realizar un trabajo de seguimiento y coordinación con las fuerzas del orden que dio sus frutos. Estuvimos en todo momento coordinados con los Mossos d'Esquadra y con las diferentes empresas de las zonas afectadas. Creamos canales de comunicación muy ágiles que nos permitieron compartir información de forma inmediata y así minimizar el impacto de las diferentes movilizaciones que se iban produciendo. El ánimo y colaboración de nuestros socios fueron cruciales".

 ¿Qué opinión le merece los acuerdos alcanzados por el Comité Nacional con el Ministerio de Transportes que ha dado lugar a un Real Decreto-Ley y a otra serie de medidas que reportarán más de 1.000 millones de euros al sector?

"Son un gran logro y avance para el sector. Se han conseguido legislar aspectos reivindicados históricamente que ayudan a equilibrar nuestras relaciones mercantiles: obligación de la indexación de la variación del precio del combustible, prohibición de la carga y la descarga por parte del conductor, reducción de los tiempos de espera a una hora, ley de morosidad en el transporte, ICOs ayudas al abandono de la actividad, devolución mensual gasóleo profesional… Por otro lado, el paquete de medidas económicas de ayudas directas al sector supone un cierto alivio en la tesorería de las empresas. Todo ello debemos valorarlo de forma positiva y agradecer la labor de nuestros negociadores. No obstante, sigue quedando trabajo por hacer".

El problema de fondo es estructural y el hecho de que en muchas ocasiones se trabaja por debajo de los costes. Desde su experiencia, ¿qué solución habría a esta circunstancia?

"Hay que poner en valor nuestro sector, nuestra actividad y nuestro servicio. Los primeros en hacer esto debemos ser nosotros mismos. Hay que hablar y negociar con nuestros clientes. Tenemos la necesidad de entendernos y ayudarnos de forma mutua. El servicio de transporte no es gratis. Desde el punto de vista social, a menudo se ve a los camiones como una molestia: son incómodos en la carretera, pero tener carreteras sin camiones implica no tener productos en los supermercados, ni suministros en las fábricas, ni combustible en las estaciones de servicio, ni medicamentos en los hospitales y farmacias… No tener camiones en las carreteras supone paralizar totalmente a la sociedad.  #Somosimprescindibles".

En Barcelona han tenido un problema con la activación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), en el sentido de que muchos transportistas han quedado fuera de algunas exenciones decretadas por el ayuntamiento. ¿Cómo está la situación en este momento?

"La ordenanza de ZBE entre rondas de Barcelona es una de las más restrictiva y de ámbito territorial más extenso de Europa. Impide el acceso de lunes a viernes de 7:00 a 20:00 horas a todos los vehículos sin etiqueta medioambiental, incluidos los profesionales de servicio público, algo con lo que el sector del transporte nunca estuvo de acuerdo, más cuando no se han aportado ayudas económicas para la reconversión de flotas, ni se han ofrecido alternativas para la adaptación de vehículos. Se consiguió negociar prórrogas en su aplicación para los vehículos profesionales y ciertas excepciones a la norma, pero que en ningún caso recogen toda la casuística y situaciones que se dan en el sector".

"Por todo ello la ordenanza fue impugnada por Transcalit junto con otras organizaciones y colectivos. En el mes de marzo tuvimos sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña en la que declaraba la nulidad de esta norma. La sentencia todavía no es firme, por lo que sus efectos se siguen aplicando. Estamos a la espera de la decisión del Tribunal Supremo de admitir o no a trámite el recurso de casación que ya ha interpuesto el Ayuntamiento de Barcelona. Mientras, seguimos insistiendo en la necesidad de negociación con las Administraciones para que los objetivos que se fijen sean progresivos y realistas y no conlleven perjuicios irreparables al sector. El transporte de mercancías por carretera quiere y debe ser parte activa en la lucha contra el cambio climático".

 ¿Cómo ve la evolución del sector para la segunda mitad del año?

"Creo que todavía nos quedan unos meses difíciles. Estamos en un momento de cambio y requerirá tiempo para adaptarse. Es también un momento de oportunidades y, por tanto, habrá que estar atentos para aprovecharlas y salir fortalecidos". 

PERSONAL E INTRANSFERIBLE

Graduada social y técnica en prevención de riesgos laborales, es amante de los gatos -tiene uno llamado Trasto- y le encanta viajar, ya sea a destinado exóticos o incluso “a los de siempre, pero buscando algo que los haga diferentes”, comenta. La lectura es otra de sus aficiones, sobre todo la relacionada con la novela histórica, si bien también le gustan los cómics del universo Marvel… Ah, y los parques de atracciones, sin dejar de lado disfrutar de una charla con amigos en la terraza de un bar tomando un aperitivo.