REVISTA TRANSPORTE PROFESIONAL
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Ya se ha dado el pistoletazo de salida a la primera estación de carga de megavatios para camiones eléctricos de MAN en Múnich, una apuesta por la movilidad ecológica, económica y de vanguardia que se está desarrollando en Baviera —afirma Markus Söder—. "Tenemos que poner a nuestra industria nacional en condiciones para poder competir. La innovación y la tecnología son la garantía de futuro».
La carga por megavatios marcó el inicio de un componente clave en la transición hacia una movilidad respetuosa con el medioambiente dentro del sector de los vehículos industriales, así como en la electrificación satisfactoria de autobuses y camiones. Especialmente en el transporte nacional e internacional de larga distancia o en situaciones de carga y descarga, los camiones eléctricos —y, en el futuro, los autocares eléctricos— requerirán cargadores con tecnología MCS para afrontar cargas rápidas durante los tiempos de descanso prescritos por ley. Esta nueva tecnología complementa las soluciones existentes, por lo que la recarga en el depósito de vehículos con capacidades de carga inferiores seguirá desempeñando un papel central en el futuro.
En el centro de desarrollo de MAN en Múnich, donde ABB E-mobility instaló uno de los primeros puntos de recarga de megavatios de Alemania, se ha demostrado que el estándar MCS funciona. «El sistema MCS permitirá que, en un futuro próximo, el transporte de larga distancia
con camiones y autobuses sea sostenible. Y así lo hemos demostrado. Si bien es cierto que todavía estamos presentando un prototipo, el nuevo estándar MCS nos ha permitido duplicar el amperaje y la capacidad de carga en pocos años" —destaca Michael Halbherr, consejero delegado de ABB E-mobility—. "Si queremos facilitar la transición energética en el transporte, necesitamos soluciones que sean sostenibles, fiables y económicas. Para lograrlo, tenemos que pensar de forma integradora y trabajar juntos. La demostración de hoy es también el resultado de la estrecha colaboración entre MAN, ABB E-mobility y toda la industria».
Preparando la infraestructura eléctrica para favorecer la electromovilidad
Durante el lanzamiento de la recarga por megavatios, Alexander Vlaskamp, CEO de MAN Truck & Bus, reiteró su llamamiento para acelerar la expansión de la infraestructura de recarga: «El objetivo es contar con 30.000 puntos de recarga MCS en Europa para 2030, unos 4.000 en Alemania. Hoy hemos puesto en funcionamiento uno de los primeros puntos de recarga, pero no queda mucho tiempo. Los camiones eléctricos están listos y la recarga por megavatios funciona. Lo que ahora se necesita son señales claras de los políticos, sobre todo para generar confianza entre nuestros clientes a favor de la electrificación. En estos momentos es necesaria la rápida construcción y ampliación de la infraestructura».
El nuevo estándar de carga de megavatios MCS está diseñado para capacidades de carga de hasta 3,75 MW a 3000 amperios (A). Con un prototipo de tecnología de carga, ABB E-mobility y MAN han presentado y probado una potencia de carga de más de 700 kW. Una vez que se concluya el estándar MCS, se podrán conseguir capacidades de carga de más de un megavatio, lo que supondrá una mejora significativa de los tiempos de carga.
A modo de comparación, las estaciones de carga actuales con el estándar CCS (sistema combinado de carga) las pueden utilizar tanto turismos como vehículos industriales y ofrecen una capacidad de carga máxima de 400 kW a 500 A. Se espera que el proceso de normalización internacional del sistema de carga de megavatios finalice este año. En el marco de la asociación industrial internacional CharIN, ABB E-mobility y MAN han aportado su experiencia para crear el estándar MCS.
El estándar MCS requiere una gran cantidad de energía. Y en estos casos en los que fluye tanta electricidad, factores como las conexiones a la red, la infraestructura que soportan los puntos de carga visibles, así como el espacio (por ejemplo, en las estaciones de servicio de las autopistas, los aparcamientos o las paradas de camiones) juegan un papel clave. La ampliación y la digitalización de la red eléctrica, además de ser esenciales para el futuro suministro de energías renovables, son también un requisito indispensable para la infraestructura de recarga.