No se producirán cortes de tráfico durante los ocho meses de ejecución, pero sí se obligará a que los vehículos circulen a 60 kilómetros/hora. Tal y como informa la Asociación Navarra de Empresas de Transporte (ANET), se establecerán pasos alternativos en diversos puntos durante las obras del primer tramo, por lo que, en esas zonas concretas la velocidad deberá reducirse a 40 kilómetros/hora.
Cabe esperar que se produzcan retenciones en las horas punta pero, a diferencia de otras ocasiones, esta vez no se han establecido desvíos obligatorios a la AP-15 en función de las matrículas pares o impares.
En esta ocasión, no se han establecido desvíos obligatorios a la autopista AP-15
Por otra parte, se informa de la instalación de dos nuevos radares en la N-121-A (Pamplona-Behobia), a la altura de Ventas de Arraitz y Bera, que están pendientes de su activación después de haber sido sometidos a verificación metrológica.
Uno de los radares se encuentra en la entrada norte de Ventas de Arraitz, a la altura del kilómetro 25,700 en sentido Pamplona, con una limitación de 50 kilómetros/hora. El otro radar se ha instalado en el punto kilométrico 60,200 en sentido Behobia, a la altura del término municipal de Bera y estará situado entre el viaducto de Etxalar y el túnel de Amixelaieta, un tramo que se encuentra limitado a turismos a 80 kilómetros/hora.