
El primero en intervenir ha sido José Manuel Lara, consejero delegado de Transportes Lara, quien ha intentado dar respuesta a una cuestión tan evidente como difícil de responder, como es la existencia de una normativa adecuada para el transporte de productos alimenticios en cisternas.
En este sentido, Lara ha dejado claro que, hoy en día, ”adolecemos de una legislación al estilo del ADR, y la que hay está dirigida únicamente a garantizar la seguridad y trazabilidad de los alimentos, además de que existen un gran número de exigencias que a veces llegan hasta el extremo”.
Pero sin lugar a dudas, las gran preocupación de José Manuel Lara tiene que ver con el hecho de que, en gran medida, “nos vemos abocados a los distintos protocolos particulares de nuestros clientes, que van desde requerimientos en cuantos a los equipos cisternas (bombas, compresores, etc.) hasta los propios tipos de cisternas. A todo ello hay que sumarle el problema de la incompatibilidad de carga, la tipología de los distintos tipos de lavados y los lavaderos homologados. Resulta muy complicado, en conclusión adecuarse a las distintas exigencias que sufrimos, traduciéndose todo ello en una falta clara de productividad”.
Por todo ello, el Consejero Delegado de Transportes Lara, aseguró que “es preciso que haya una normativa clara, homogénea y precisa en este sentido, teniendo siempre presente que no podemos dejar que los clientes nos exijan de forma arbitraria lo que quieran”.
Seguidamente, tomó la palabra María Sevillano, coordinadora de Seguridad Alimentaria y Medio Ambiente de AB Azucarera, cuya intervención versó sobre lo que esperan los cargadores de las empresas de transporte de productos alimenticios en vehículos cisternas.
La ponente dio una serie de pautas sobre todo aquello que exigen a sus clientes desde el punto de vista de la seguridad. Así, Sevillano se refirió a los requisitos básicos descritos en el reglamento de “Higiene de los Alimentos”, a los fundamentos relacionados con “Alérgenos y contaminación cruzada” y el etiquetado de alimentos, y a las buenas prácticas en relación con “Prevención de Sabotajes (Food Defense)”.
Y es que “tenemos que asegurar a nuestros clientes lo que requieren; se trata al fin y al cabo de hacer un análisis de riesgo. Con todo, debemos tener un comunicación fluida con los transportistas para resolver los puntos de dificultad que podamos tener, y siempre trabajando en conjunto”, explicó María Sevillano.
En último término, tomó la palabra Nelly González, directora de Finanzas, Estudios Económicos y Talento de la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB), quien disertó sobre las perspectivas de la industria alimentaria.
Sobre ello, habló acerca de la importancia que tiene la exportación en este sentido, admitiendo en todo momento que, “sin vosotros, los transportistas, nuestros productos no podrían salir al exterior y llegar a su destino; no podríamos cubrir nuestras necesidades, de ahí que tengáis un gran peso específico”, afirmó Nelly González.
Ahora bien, se trata de una importancia creciente, en tanto que a pesar de que España es líder en exportaciones de alimentos, “es necesario diversificar los destinos para que nuestra industria siga creciendo, con lo que tenemos un reto en común. Nos tenéis que acompañar en todo este proceso de internacionalización”, concluyó la directora de Finanzas, Estudios Económicos y Talento de FIAB.