Aunque el acuerdo posBrexit prevé el acceso ilimitado al transporte internacional sin cuotas ni imitaciones de cupo para las empresas transportistas que transportan mercancías por carretera entre la UE y el Reino Unido, la obligación de realizar nuevos trámites burocráticos, la falta de información clara sobre los procedimientos a seguir y la ralentización que están sufriendo los camiones que prestan dichos servicios, con el consiguiente incremento de los costes, está desincentivando a muchos transportistas españoles y de otros países europeos a continuar realizando tráficos a dicho país, sobre todo en el transporte de mercancía británica hacia el continente, optando por elegir destinos más cómodos y de mayor rentabilidad en el resto de Europa.
Muchos transportistas están optando por otros mercados más cómodos y con mayor rentabilidad
Dicha situación ha obligado al Gobierno británico a flexibilizar, hasta el próximo 31 de marzo, la regulación sobre tiempos de conducción y descanso que deben cumplir los conductores profesionales mediante el tacógrafo, permitiendo que puedan tomar seguidos los descansos semanales reducidos para poder realizar jornadas semanales de seis días consecutivos e incrementando el tiempo máximo de conducción bisemanal hasta las 96 horas, entre otras.