
En esta ocasión, los incidentes se han producido en la frontera del sur de Francia con España, en los departamentos de Aude y Pirineos Orientales, en concreto, en el área de peaje de Le Bolou, donde se concentraron centenares de viticultores franceses que procedieron a fijar barricadas, quemar neumáticos para bloquear a los camiones españoles que transportan al resto de Europa vino español, y otros productos hortofrutícolas.
Estas acciones desarrolladas por los viticultores franceses han ocasionado graves daños a los transportistas, que han visto cómo se arrojaba al suelo y destrozaba la carga transportada, sobre todo vino para su exportación al resto del Europa.
Los ataques a los camiones españoles se repiten
Estas acciones violentas en contra de las exportaciones de productos españoles y contra los transportistas no son actos aislados, sino que se vienen produciendo periódica y desde los años 80, cuando se produjeron los primeros ataques franceses a camiones y mercancías españolas cuyo destino no sólo era Francia, sino el resto del mercado europeo, generando un gran perjuicio económico y cuantiosos daños a los transportistas y a la economía española en general.
Ya la Justicia europea condenó al Estado francés por estas agresiones, como responsable subsidiario de los daños ocasionados por las actuaciones agresivas de sus ciudadanos, En concreto, una sentencia del Tribunal Europeo de Justicia de la Unión Europea, dictada en diciembre de 1997, condenó a Francia por los ataques de los agricultores franceses a camiones españoles, al no haber garantizado la seguridad de los transportistas y haber actuado con pasividad ante los ataques. En concreto, al no haber procurado ni adoptado las medidas necesarias para que las acciones violentas de sus ciudadanos no impidan ni obstaculicen la libre circulación de los vehículos y mercancías por el territorio europeo.