En la sesión plenaria del Comité Europeo de las Regiones, celebrada el 16 de abril, se aprobó implemenar el Libro Blanco del Transporte de 2011 de la Comisión Europea, impulsando la creación de una única área europea de transporte.
Este organismo comparte los objetivos de la Comisión de transformar el sistema de transporte europeo promoviendo la independencia del petróleo y creando una movilidad multimodal. Sin embargo, crece la preocupación de que el plan Juncker dilapidará los 2.700 millones de euros "cuando el presupuesto ya es demasiado pequeño para construir la Red Transeuropea de Transporte".
La Comisión Europea de las Regiones lamenta que la Unión Europea está haciendo una "inversión claramente inadecuada" para un sistema sostenible de transporte y enfatiza que el transporte es una parte crucial de la economía europea y que esto debe continuar para ser una gran política europea.
Además, el organismo recalca la necesidad de hacer el sector del transporte en Europa más competitivo. Para conseguir este propósito, reclama promocionar y asegurar la libertad de circulación de mercancías y productos en el seno del mercado interno. No obstante, el Comité puntualiza que, aunque esto es especialmente importante en el sector del transporte por carretera, hasta ahora no se han tomado iniciativas relevantes en el mercado interno.