
Los trabajadores del centro logístico de Amazon en San Fernando de Henares (Madrid) se han concentrado a las puertas del centro como protesta a sus condiciones laborales. Por su parte, la multinacional norteamericana ha tenido que tomar medidas para contrarrestar el efecto negativo que ha tenido sobre los envíos de los miles de clientes que, cada día, compran sus productos a través de esta plataforma.
La huelga de Amazon fue convocada hace una semana y su intención era hacer un paro de 48 horas para protestar por sus "precarias condiciones laborales". Tras secundarse durante el 21 y 22 de marzo y haber tenido un seguimiento del 95% (según los sindicatos), la dirección ha asegurado que su logística "se ha visto afectada".
Durante la protesta, los sindicatos CCOO y UGT han valorado la respuesta dada por los trabajadores en un conflicto "que se está siguiendo con atención desde todos los ámbitos, por afectar a una empresa que, a veces, encubre la falta de respeto a los derechos laborales".
Según UGT, "más allá de las maniobras de la dirección para minimizar el éxito de la huelga de cara a la opinión pública", la dirección de Amazon "debe reflexionar sobre la necesidad de establecer un diálogo y negociación constructiva, una negociación que atienda a la demanda de la plantilla". Por eso ha hecho un llamamiento a la dirección de la empresa "para que se siente en la mesa de negociación con los representantes sindicales de los trabajadores".