Lo que establecen estos Reglamentos comunitarios es que los controles mínimos sobre jornadas de conducción o empresas de transporte los debe realizar cada Estado miembro. Se trata de armonizar, de manera que las reglas de competencia sean las mismas en todo el territorio de la Unión, tanto sociales como empresariales.
Así, la Directiva 2006/22/CE establece un sistema de clasificación de riesgos de las empresas basado en el número de infracciones cometidas y su gravedad. De esta forma, las empresas que obtuvieran una calificación que las considere de alto riesgo, deben ser sometidas a más controles y más estrictos que las demás.
Cómo se hará el control a las empresas de transporte
La fórmula que se aplique para determinar el riesgo de las empresas de transporte debe tener en cuenta el número, la gravedad y la frecuencia de las infracciones, así como los resultados de los controles cuando no se haya detectado ninguna infracción.
El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha confirmado a las asociaciones de transportistas que será a finales de 2024 cuando se ponga en marcha este Reglamento.