Solo en lo que respecta a los neumáticos, a través de un mantenimiento predictivo, se pueden reducir en un 70% las paradas inesperadas y las asistencias en carretera ocasionadas por un problema en las cubiertas, según Euromaster, socio de movilidad de los profesionales del transporte, que tiene en el piloto de carreras madrileño a su “embajador” de conducción segura.
Además, el transportista debe adquirir ciertas pautas de mantenimiento y apoyarse en el especialista para no limitarse a verificar lo que marque el fabricante, sino también estar atento a fallos que aparezcan de manera improvisada. De este modo, aunque el mantenimiento en taller suponga un coste, nunca será tan elevado como el de tener una avería y el camión inmovilizado, pues anticipar ayudará a los transportistas a ahorrar un 40% en reparaciones innecesarias por el mal estado del vehículo y, en última instancia, a tener un accidente.
En este sentido, desde su larga experiencia al volante, Antonio Albacete recomienda escuchar al camión, a sus neumáticos, frenos o motor para, ante cualquier percepción poco habitual, parar a tiempo, pues pueden ser síntomas que acaben con el camión accidentado.
Conducir también es mantener
El estado del camión no depende sólo de los kilómetros que circule, sino también de la forma de conducir de quien esté al volante. Una conducción brusca al arrancar, frenar o cambiar de marcha provoca mayor desgaste en las piezas mecánicas del vehículo. Además, la falta de tacto, a veces a consecuencia de las prisas, provoca una circulación más nerviosa, aumentando de manera exponencial el riesgo de accidente, sobre todo por provocar un desplazamiento en la carga que haga volcar el vehículo.
También es precisa la anticipación, evitando la llamada conducción automática por muy conocidas que sean las rutas de transporte, ya que “la carretera es un ser vivo, las condiciones cambian y el exceso de confianza se traduce en menos atención y en menor capacidad de reacción en situaciones de frenadas anticipadas o cambio de carril, por citar dos situaciones de riesgo”, según Antonio Albacete.
Todo ello conforma una serie de pautas que el transportista debe aplicar también fuera de su horario laboral, cuando coge su vehículo particular, teniendo en cuenta su vida, las de los ocupantes y las del resto de usuarios de la vía.
Según Elías Ocque, responsable de VI de Euromaster, “apostamos por un mantenimiento predictivo para los camiones y furgonetas a través de soluciones tecnológicas que permitan conocer a fondo el estado general de las flotas, anticipando así incidencias, reduciendo asistencias y optimizando el coste por kilómetro de cada vehículo. Tenerlo inmovilizado en el taller supone un coste extra por todo lo que deja de ingresar en este tiempo al no tener el camión disponible, sin perder de vista un coste irreparable: la vida de las personas”.