El objeto de la reunión ha sido renovar la instrucción de vigilancia y control, que se venía aplicando desde 2012, y que los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil (ATGC) deberán desarrollar a lo largo de 2017, así como aprobar y poner en marcha un plan operativo en las carreteras.
Para controlar las conductas de mayor riesgo e incidencia directa en la siniestralidad, como son el consumo de alcohol y drogas por los conductores y los grandes excesos de velocidad se llevarán a cabo las siguientes acciones:
- Sobre alcohol y drogas, se programarán mensualmente los controles, en vías y zonas de especial riesgo, cubriendo todas las franjas horarias y días laborables y festivos, y ante cualquier infracción se realizará la prueba de alcoholemia o drogas al conductor.
- Sobre velocidad, se programarán controles en tramos INVIVE, en múltiples emplazamientos de corta duración, en todas las franjas horarias, tanto en festivos como en laborables. La notificación de la denuncia en el acto será la norma general.
- Sobre el uso de cinturón y sistemas de retención infantil, se vigilará el cumplimiento de este precepto en todos los asientos, tanto delanteros como traseros y que los niños viajen situados en los asientos traseros y que lleven correctamente abrochado el sistema adecuado a talla y peso.
- Sobre vigilancia de las maniobras antirreglamentarias, se realizará en tramos de especial peligrosidad, con especial atención a aquellas que tienen influencia en el riesgo, tales como adelantamientos, maniobras en intersecciones y cumplimiento de la distancia de seguridad.
- Sobre el estado del vehículo, se revisará el cumplimiento de la ITV y estado general del mismo, especialmente neumáticos y sistemas de luces y señalización.
- Sobre el estado de la vía, se realizarán propuestas de mejora o sobre el estado de la vía y su señalización, que se trasladarán a las Jefaturas Provinciales de Tráfico, al objeto de su posterior análisis y valoración técnica por parte de la DGT.