Las juntas generales de ambas sociedades, celebradas en Madrid y Burgos, han dado luz verde a esta operación, tras haber recibido el visto bueno de los dos consejos de administración. Los contactos que culminan ahora comenzaron un julio de 2014 y permitirán a Iberaval controlar el negocio de la compañía absorbida, de la que asume activos y pasivos.
El acuerdo de fusión por absorción contempla la puesta en marcha de una delegación sectorial que abarca los negocios específicos de transporte, pesca y acuicultura de Transaval, que operará de forma similar a las oficinas territoriales de Iberaval, presente en las nueve provincias de Castilla y León, Logroño y Madrid.
Gracias a esta operación, el capital social mínimo de Iberaval se incrementa por encima del 15%, pasando de 25 a 30 millones de euros. También aumenta el valor real de las participaciones de los actuales socios, al sumar cerca de seis millones de euros al fondo de provisiones técnicas.
Transaval, que tiene seis de cada diez euros avalados en Madrid y Cataluña, cuenta con más de 1.000 socios, que suman a los 21.000 con que cerró 2014 Iberaval. Desde el inicio de la sociedad, Transaval ha respaldado a cerca de 5.000 proyectos de inversión y financiación, a partir de avales a emprendedores, autónomos y pymes.