El pasado mes de junio de se produjo una fuerte disminución en los plazos de pago frente al mes anterior, situándose en 66 días de media, frente a los 70 días del mes anterior, como ha constatado el Observatorio permanente de la morosidad y los pagos en el sector del transporte por carretera que elabora mes a mes la Fundación Quijote para el Transporte.
El porcentaje de empresas cargadoras e intermediarias que incumplen la legislación sobre morosidad se sitúa en el 54%, aunque en la mayoría de los casos los excesos de plazo de pago son leves. Así, del porcentaje de empresas incumplidoras (61%) pagaron a menos de 90 días y sólo un 9% a más de 120 días, teniendo en cuenta que esta franja de incumplimiento en 2022 se situaba en más del 20%.
En cuanto a los medios de pago que son utilizados más habitualmente para el pago de los servicios de transporte, continúan siendo, por este orden, la transferencia (70%), el confirming (26%), el pagaré (4%) y el cheque (<1%).
Lucha contra la morosidad en el transporte
Para mejorar en la lucha contra la morosidad, la Comisión Europea ha confirmado que está trabajando en un proyecto de modificación de la actual Directiva sobre retraso en los pagos, para establecer nuevas medidas que hagan más efectivo el cumplimiento de dicha normativa, teniendo en cuenta que la morosidad en las transacciones comerciales tiene múltiples efectos perjudiciales, sobre todo entre las pymes, provocando una de cada cuatro quiebras en la Unión Europea.
Para ello, se ha constituido el Observatorio de Pagos de la Unión Europea, del que forman parte diferentes entidades e instituciones, tanto públicas como privadas, interesadas en analizar dicha problemática.
En la actualidad, este observatorio está trabajando en el monitoreo de los comportamientos de pagos en las transacciones comerciales dentro de la Unión Europea, así como en la recopilación y análisis de iniciativas y documentos de políticas relevantes puestas en marcha por las diferentes autoridades u otras entidades en cada país para combatir la morosidad en las transacciones comerciales y, en general, para promover una cultura de pago puntual en el entorno empresarial.