Para la asociación de transporte de Tarragona, la "solución" propuesta por el RACC (Real Club Automóvil de Cataluña) no es la más adecuada, debido a las siguientes razones:

• La solución del RACC es idéntica a la de la Nacional II a su paso por Gerona, cuando la problemática es bien diferente, tal y como han reconocido desde la Consejería de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Cataluña.
• La solución del RACC, a pesar de las declaraciones de su presidente, diciendo que no son aceptadas por el "territorio", no es la solución que vecinos, transportistas y alcaldes, tanto de la zona del Ebro como del Pacto de Berà están reivindicando, pues todos ellos piden la gratuidad en los tramos de autopista paralelos a la N-340.
• Los transportistas no son los responsables de paralizar las inversiones en vías públicas, o en no desdoblar en su día la N-340 y, por tanto, la federación rechaza la pretensión de hacerles culpables de la siniestralidad de esta carretera. "Muchos transportistas mueren cada año en las carreteras haciendo un trabajo que es indispensable, tanto social como económicamente" aseguran en la asociación.
• La medida de prohibir el tránsito a camiones es excepcional, y tiene que ir acompañada de una alternativa de paso que no suponga un incremento del coste, "puesto sería establecer un nuevo impuesto".
• Cada transportista sabe perfectamente el coste que tiene cada trayecto. Esto echa por tierra el argumento de que pasar por una autopista compensa pagar un peaje bonificado al ahorrar carburante, tiempo, etc. "Si de verdad fuese así, no habría necesidad de prohibir el paso por la N-340, y pasarían de forma voluntaria por la autopista".
• El porcentaje de bonificación está calculado para que la medida no tenga ningún coste para la Administración, pues el incremento de tránsito compensa la inferior recaudación por cada camión que pasa. Así pues, la federación Feat se pregunta: "¿por qué la reducción de la siniestralidad y su mortalidad asociada no merece ningún tipo de aportación de dinero público, y sólo se exige un sacrificio económico a las empresas de transporte?"
• Cada camión paga no sólo impuestos generales, sino que, cada vez que llena el depósito, el 55% del coste son impuestos específicos sobre el carburante. Unos impuestos fueron creados para construir y mantener las carreteras. "Decir que el transporte, cuando no circula por autopistas de peaje, circula gratis, es una gran mentira".

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