
España cuenta con un ecosistema de automoción competitivo e innovador compuesto por proveedores, fabricantes de vehículos, centros tecnológicos, ingenierías y universidades de primer nivel. Solo los proveedores de automoción invierten cada año en I+D+i más del 4% de su facturación (1.458 millones de euros en 2019), lo que nos posiciona como un país de referencia dentro del contexto mundial.
Este ecosistema, reunido en la Plataforma Tecnológica Española de Automoción y Movilidad – Move to Future, que coordina Sernauto, tiene definida una ‘Agenda de Prioridades Estratégicas I+D+i del Sector Automoción’, una hoja de ruta nacional que marca las cuestiones relevantes en las que está trabajando el sector y que son claves para el futuro: los sistemas de propulsión y combustibles alternativos, la movilidad segura más autónoma, el aligeramiento de peso del vehículo, la fabricación inteligente y el fomento de la I+D+i a través de la normalización y la formación.
Tal y como se le ha trasladado al Gobierno, la iniciativa de colaboración público-privada sería la herramienta idónea para poner en marcha lo contenido en la ‘Agenda de Prioridades Estratégicas’ pudiendo, además, sumar a otros sectores relacionados como el energético, el de las infraestructuras o el de las TIC.
Desde Sernauto se está trabajando en una serie de proyectos tractores colaborativos de interés común, relativos a la conducción automatizada y conectada
José Esmorís, presidente de la Comisión de I+D+i de Sernauto, señaló que “en estos momentos en los que se están reduciendo o paralizando inversiones, nuestro país no puede quedarse atrás. Desde el sector tenemos la estrategia y la visión, pero necesitamos que desde el Gobierno se ponga en marcha esta Iniciativa de Colaboración público-privada que cuente con la dotación presupuestaria suficiente para apoyar la I+D+i y la transformación tecnológica e industrial en el que estamos inmersos”.
Proyectos colaborativos
Además, desde Sernauto se está trabajando en una serie de proyectos tractores colaborativos de interés común, relativos a la conducción automatizada y conectada, la cadena de valor de las baterías, el hidrógeno y la industria inteligente, para que sean desarrollados dentro de la ICPP de Automoción.
Con todo, “de cara a garantizar el futuro de nuestra industria de automoción, es clave convertir a España como referencia internacional, por ejemplo, para pruebas de conducción autónoma y conectada y atraer empresas para colaborar en el desarrollo de tecnologías y sistemas para esta nueva movilidad. Tenemos la situación perfecta para convertirnos en ecosistema de referencia y poder atraer inversiones y nuevos proyectos a nuestro país, pero debemos contar con una estrategia-país ya que nos posicione en el ámbito internacional en el lugar que nos merecemos”, concluyó José Esmorís.