La Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) considera que esta medida es "discriminatoria e injusta, pues incide de forma desproporcionada sobre el transporte de mercancías por carretera, sector que presta un servicio ineludible para la sociedad, la industria y el comercio, al transportar de manera rápida y eficiente más del 85% de los productos que consumimos cada día, lo que le posiciona como una pieza clave para el desarrollo económico y social de España".
Además, la CETM entiende que la implantación de nuevos peajes "comportaría efectos dañinos inmediatos en la competitividad de toda la economía española, al encarecer de forma innecesaria el precio de todos los productos, afectando de manera negativa tanto a los fabricantes, que verían incrementados sus costes, como a los consumidores finales, al reducirse su poder adquisitivo".
De esta manera, la confederación del transporte por carretera rechaza de forma rotunda esta medida al considerar que su puesta en marcha "lastraría la producción y el consumo, imprescindibles para afrontar con éxito el cambio de ciclo económico en el que nos encontramos y salir definitivamente de la crisis".