El motivo de las obras será reforzar el revestimiento y adecuar las instalaciones a lo que dicta la Directiva 2004/54/CE del tubo sentido San Sebastián del túnel de San Lorenzo, en la autopista A-15. Por ello, los vehículos con mercancías peligrosas tienen prohibido el paso mientras duren las obras, y está limitado el gálibo en altura a 4,5 metros y en anchura a tres metros.
Los puntos kilometrícos en los que existe restricción son del 142 al 156, que se corresponden con los enlaces de la A-15 en Berastegi, en unión con la GI-2130 y el enlace con Andoain, unión con la Nacional I.
El periodo de restricción va desde el 16 de junio al 15 de noviembre. Además, la restricción es completa desde el 14 de junio por la noche hasta el 16 por la noche.
El proyecto cuenta con un presupuesto de 6,6 millones de euros
Según el portavoz de la Diputación Foral de Guipúzcoa, el consejo de Gobierno ha aprobado destinar 6,6 millones de euros a esta remodelación, "una invesión de calado, que supondrá actuaciones durante un periodo de cinco meses en el interior del túnel, con las correspondientes afecciones al tráfico". Se espera que para el mes de noviembre, el túnel vuelva a estar abierto en su totalidad.
El proyecto contempla las siguientes actuaciones:
- Soluciones de estabilización
- Renovación del drenaje
- Adecuación de las instalaciones de suministro de energía
- Redimensionamiento de los equipos eléctricos
- Actualziación del sistema de iluminación con tecnología LED para reducir el coste de explotación
- Reinstalación del sistema de ventilación e inclusión de un sistema de protección contra incendios
Además, está previsto incorporar tecnología punta para actualizar la gestión viaria, controlar la circulación y los aforos y mejorar el sistema de circuito cerrado de televisión para instalar un sistema de detección autonómica de incidentes y el sistema de comunicaciones con el usuario, renovando el sistema de postes SOS e incluyendo megafonía.