Según la DGT, la presencia de sustancias psicoactivas, alcohol y otras drogas es frecuente en los accidentes de tráfico. Lo demuestra el dato de que el 43% de los conductores fallecidos en accidente de tráfico y analizados en 2017 por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses consumió alcohol, drogas ilegales o medicamentos. Las últimas encuestas nacionales e internacionales coinciden en el diagnóstico de que la tolerancia a consumir y conducir "es muy alta".
La Dirección General de Tráfico asegura que el trienio 2014-2017 ha sido "malo" en cuanto a la seguridad vial. El pasado año murieron 25.300 personas en las carreteras europeas y hubo 135.000 heridos en los accidentes de tráfico. "Las drogas psicoactivas tienen efectos negativos en la conducción, tanto en el comportameinto cognitivo como en la función psicomotora. Las drogas en la conducción no se entienden igual que el alcohol. Parece que tiene menos efectos, pero no es así" ha explicado el director general de Tráfico en una jornanda sobre drogas y conducción.
La DGT va a intensificar las campañas de detección de drogas en conductores, y espera ampliarlo a las empresas
Por su parte, el subdirector adjunto de Investigación de la DGT, Juan Carlos González, ha asegurado que las cifras de detección de drogas a conductores "son muy preocupantes si tenemos en cuenta que, cuanto más frecuente es la presencia de drogas, más grave es el accidente".
Para ello, la DGT tiene previsto realizar pruebas para detectar el consumo de drogas en conductores: serán 100.000 en 2018 y 150.000 en 2109. Según sus datos, el pasado año se efectuaron casi 90.000 pruebas, de las que más de 31.000 dieron positivo. José Luis Díaz, segundo jefe del Área de Operaciones de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, explica que "el incremento del número de conductores que han dado positivo en drogas se debe, principalmente, a que cada vez se hacen más controles".