La Diputación foral de Guipúzcoa ha culpado de esta situación a la afluencia de camiones y al aumento de controles en la frontera por el lado francés ante la amenaza yihadista y los actos terroristas del pasado mes de marzo. Debido a esto, y para controlar el tráfico y los conductores que utilizan esta vía, los franceses no abren todas barreras en los peajes de la autopista en Biriatou.
La explicación dada por la institución foral ante esta situación es que, "las empresas de transporte de mercancáis suelen organizar sus envíos de forma que los lunes por la mañana salen desde el sur o el centro de España o desde Portugal. Así, el que va a pasar la frontera suele hacerlo los martes al mediodía o por la tarde".
Los representantes forales están abordando esta cuestión con los responsables de gobierno del País vasco-francés en los órganos de colaboración puestos en marcha en el marco de la zona Donostia/San Sebastián-Bayona.