
La empresa Transportes Buytrago presentó un Expediente de Regulación de Empleo a su plantilla el pasado mes de febrero y, según fuentes de Comisiones Obreras, "en menos de una semana, dejaron las naves prácticamente vacías de personal y mercancía, sin apenas tiempo para que los trabajadores pudieran sacar los enseres de las taquillas".
Así, el personal de la empresa recibió una comunicación de la dirección señalando que el problema de la empresa se resolvía con un descuelgue salarial, y otra en la que se les informaba que se habían quedado sin clientes. En un tercer comunicado, instaban un preconcurso de acreedores, para concluir que se presentaría un ERE para extinguir el contrato de trabajo del cien por cien de la plantilla.
Tras estos nueve meses, las actuaciones posteriores al cierre han ido encaminadas a allanar el camino legal. Los dueños de Transportes Buytrago presentaron un concurso de acreedores, que ha durado más cuatro meses. Según Comisiones Obreras, durante este tiempo, un equipo de la empresa han seguido de alta en la compañía haciendo labores de cobro y pagos y han administrado créditos de la empresa, ya que no les han quitado esas facultades, pero a encontrarse en situación de liquidación.