
Una siniestralidad que se ha incrementado en la Comunidad de Madrid un 5% en el año 2012 en relación a 2011 –en el resto de España disminuyó un 1%-, y que ha tenido en la alta antigüedad media de los vehículos (superior a los 15 años) su principal causa, teniendo en cuenta que se trata de unidades con escasa presencia de dispositivos de seguridad, tipo ABS o controles de tracción y estabilidad.
Según el informe, la accidentalidad en este caso es mayor (un 60%) durante la jornada laboral al ser vehículos destinados principalmente al transporte profesional, mientras que el 40% de los accidentes se dan "in itinere", es decir, durante la ida y vuelta al trabajo.
Un dato relevante del estudio tiene que ver con la influencia que ejercen sobre las furgonetas las relaciones de masas, o lo que es lo mismo, la colocación de la carga. En este sentido, si las mercancías están amarradas correctamente el riesgo de derrapaje o vuelco será menor, mientras que si la carga se desplaza el punto de gravedad del vehículo cambia constantemente y el riesgo de accidente es mayor.
Con todo, el IRSST y el RACE distribuirá a empresas y trabajadores de la Comunidad de Madrid una serie de materiales como parte de la campaña, que se centran en 10.000 dípticos informativos y adhesivos con consejos de seguridad para prevenir los accidentes de tráfico en furgonetas.