
Según los datos del informe, cuatro de cada diez compañías (41%) están renovando su flota para hacerla más sostenible, aunque la adopción de tecnologías limpias todavía avanza a un ritmo moderado.
En concreto, solo un 14% ha iniciado procesos de electrificación de parte de su flota, mientras que un 11% utiliza combustibles alternativos. Además, una de cada cinco empresas (20%) monitoriza el estilo de conducción de sus empleados con el objetivo de reducir la huella medioambiental.
Futuro de los combustibles
A la hora de mirar al futuro, el 30% de las empresas sigue confiando en el diésel, aunque el 25% considera que el hidrógeno será la tecnología dominante en los próximos años, y un 23% apuesta por los vehículos eléctricos.
Los biocombustibles (15%) y el gas (2%) completan el panorama, mientras que los e-fuels apenas son considerados por un 1% de los encuestados
El estudio también destaca que mejorar el estilo de conducción puede reducir hasta un 15% el consumo de combustible, lo que refuerza el papel de la formación de conductores y de las soluciones de monitorización como herramientas clave para avanzar hacia una flota más eficiente y respetuosa con el medio ambiente.
Certificados de Ahorro Energético (CAE)
A raíz de estos datos, no es de extrañar que desde las administraciones se esté fomentando la sostenibilidad en las empresas mediante distintos mecanismos. Uno de ellos son los Certificados de Ahorro Energético (CAE), que permiten obtener un retorno económico directo por reducir su consumo de energía.
A diferencia de otras subvenciones, los CAE están disponibles para empresas de cualquier tamaño y sector, permiten cobros rápidos, en apenas unos meses, y el proceso para obtenerlos es muy sencillo y ágil.



































