cada vez mayores, y eso no hará más que redundar en un incremento mayor de costes. También la cláusula de revisión de precios del gasóleo es un ‘triunfo’ muy importante. ¿Dejará de ser un problema para los transportistas los vaivenes de dichos precios? El objetivo de esta cláusula en el medio plazo no otro que ese; reducir la incertidumbre que se crea con el incremento de costes, los cuales no somos capaces de repercutir en tarifas en una negociación que como bien sabemos no es entre iguales. Casi todo el mundo tiene claro que los peajes llegarán de alguna u otra forma. ¿Piensa que podrán repercutir a los cargadores este incremento de costes? ¿Lo entenderían, ahora que estos tendrán que ‘hacerse cargo’, por ejemplo, de la carga y la descarga? Es otro de los objetivos puestos encima de la mesa y uno de los puntos en los que debemos empezar a trabajar para que, tal y como ocurre en otros modos de transporte, (sector marítimo) se traslade dicho coste. Mucho por hacer Y a partir de ahora, ¿qué? Desde su perspectiva, ¿cree que, por una vez, lo firmado se va a cumplir? ¿De qué plazos hablaríamos para que el sector se diese por satisfecho? Dentro de los acuerdos ya se establecen determinadas fechas tras su publicación, pero insisto, ahora empieza la negociación, lo conseguido digamos que es un punto de inflexión. El Comité Nacional ha impugnado el plan de ayudas para la renovación de flotas, ya que deja fuera a los camiones diésel de última generación y a los de gas natural comprimido y licuado. ¿Tan difícil es para la Administración desarrollar un plan específico para el sector en este sentido? Y es que llueve sobre mojado… Parece ser que sí, que es difícil, de ahí nuestra impugnación. Como no puede ser de otro modo, el sector es consciente de la necesidad de cuidar el medio ambiente y para ello hace inversiones con ese objetivo. En este sentido, debe haber equipos con esas tecnologías (hidrógeno, eléctrico, etc.) que ahora no tenemos, de ahí la necesidad de que puedan convivir los combustibles y de esas ayudas; al igual que hacen otros países europeos. ¿Cómo ve la evolución sectorial para 2022? ¿Será este el año de su despegue definitivo y la dignificación del mismo? ¿Es optimista? Hace tiempo que digo que ya no soy ni optimista ni pesimista, sólo decir que tengo esperanza en que el sector se haga fuerte, lo cual ya sería un despegue en sí mismo. Pero estamos en un momento en el que todo apunta a tiempo de temporales, aunque no sólo para nuestro sector. Cuestiones como el incremento del IPC, de los costes del gasoil, del GNL, la dificultad para renovar flota por falta de equipamientos…, aunque quizás la más importante sea la falta de conductores. Nos debemos concienciar de que esto último es imprescindible y, para ello, todos los actores debemos sumar con el objetivo de hacer mucho más atractiva nuestra actividad. LA FALTA DE PROFESIONALES ES ALGO MUY IMPORTANTE, POR LO QUE TODOS LOS ACTORES DEBEMOS SUMAR CON EL OBJETIVO DE HACER MUCHO MÁS ATRACTIVA NUESTRA ACTIVIDAD Febrero 2022 / Transporte Profesional 39
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